P. SOTO./El Heraldo de Aragón
Oaxaca, México.- El ambicioso plan para luchar contra el calentamiento global aprobado en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UE en Bruselas desplazó a un segundo plazo la clausura de la 14 conferencia sobre medio ambiente que la ONU organizó del 1 al 12 de diciembre en la ciudad polaca de Poznan.
La conferencia climática de la ONU en Polonia acabó con sabor agridulce. El cónclave patrocinado por Naciones Unidas dejó aparcadas para la cumbre de diciembre de 2009 en Copenhague las grandes cuestiones sobre la crisis medioambiental del planeta. Dentro de un año, en la capital danesa, la ONU debería trazar la estrategia medioambiental del planeta para el año 2013 y, en adelante, una vez terminada la vigencia del Protocolo de Kioto, en 2012.
A pesar de no asumir en Poznan ningún compromiso decisorio sobre el cambio climático, en la recta final de la conferencia se reprodujeron las grandes divergencias entre países ricos y pobres frente a las medidas que se deberían tomar en el ámbito internacional para hacer frente al deterioro del planeta, como la reducción entre un 20 y un 30%, que es la posición de España, de las emisiones de CO2 o la mayor utilización de energías renovables.
Mientras países emergentes como China, India y Brasil dudan de la eficacia de las medidas medioambientales planteadas por los países de la UE y del mundo rico, Estados Unidos, que no firmó el compromiso de Kioto, no mostró excesivo entusiasmo en reducir su propia contaminación, aunque los delegados esperan un cambio de rumbo en la principal potencia del planeta de la mano de Barack Obama. Después del acuerdo de Bruselas, las diferencias en la UE, entre el Oeste, con la excepción de Alemania e Italia, y los países del antiguo bloque socialista, liderados por Polonia, quedaron aparcadas en Poznan, pero muchos expertos aseguran que rebrotarán.
En este contexto, los casi 190 países presentes en la conferencia se preparaban para adoptar una declaración de principios y buenas intenciones que debería servir de base para la futura cumbre de Copenhague.
La delegación china acusó a los países occidentales de hipocresía, porque, dice, presiona a Pekín por su falta de sensibilidad ecologista pero permite que EE. UU. desoiga a la ONU. Además, según sus portavoces, el Gobierno chino hace "grandes esfuerzos" desde 2005 por reducir la contaminación y contribuir a un planeta más limpio, algo "falso", a decir de la sección china de Greenpeace.
Según la Academia China de Ciencias Sociales, el país produce una media de cuatro toneladas de CO2 por habitante y año, Estados Unidos alcanza las 20 toneladas. México también se mostró dispuesto a reducir en la mitad sus emisiones de CO2 de cara a 2050, pero pidió que los países más ricos prediquen con el ejemplo. Parte de las delegaciones africanas se quejaron de la falta de sensibilidad de Occidente ante sus graves problemas medioambientales y pidieron más medios económicos, técnicos y políticos para solucionarlos.
[caption id="attachment_3897" align="aligncenter" width="499" caption="Al Gore pide inversión de países industrializados en energías renovables/Foto EFE"]
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Las organiaciones no gubernamentales ecologistas, que han ejercido de conciencia crítica de la conferencia de Poznan, recordaron que los graves problemas medioambientales del planeta exigen soluciones urgentes y radicales.
Greenpeace, Amigos de la Tierra y Oxfam International, entre muchas otras, llamaron la atención a los responsables políticos para que acuerden mecanismos conjuntos frente al calentamiento global.
El tiempo corre y la cumbre de Copenhague es, en su opinión, la última oportunidad sería para enderezar la situación. Las oenegés pidieron a los países ricos que lideren la nueva política ecológica.
Al Gore, el ex vicepresidente de Bill Clinton y premio Nobel de la Paz, cautivó a la audiencia en Poznan. Ante varios miles de delegados, Al Gore, enarboló el eslogan de campaña del presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, "Yes, we can" (Sí, podemos) y se mostró convencido de que la ONU puede alcanzar un acuerdo duradero para hacer frente al calentamiento global del planeta. Activo militante de la causa ecologista, Gore arrancó varias ovaciones. Cuando dijo que los países tienen que darse prisa y "negociar" y "actuar", y al introducir una luz de esperanza en medio del escepticismo de muchos.
