“El boom era un territorio de libertad y fantasía”: Ángel Esteban

Por Mario Casasús/ El Clarín de Chile

Oaxaca, México.- Ángel Esteban (España, 1963) presentará el 3 de febrero –en Madrid- De Gabo a Mario: La estirpe del Boom (Espasa, 2009). El profesor de literatura de la Universidad de Granada es categórico sobre la poesía y narrativa latinoamericana de aquella generación: “Hay muy pocos autores que manejen bien las dos realidades. Creo que Lezama no es uno de ellos, porque sus novelas son eminentemente poéticas. Borges sí dominaba los dos estilos”.

Autor de: Cuando llegan las musas (2002); Bécquer en Martí y en otros poetas hispanoamericanos finiseculares (2003); Gabo y Fidel: el paisaje de una amistad (2004); Cervantes y América (2005); Literatura cubana entre el viejo y el mar (2006); Darío a diario: Rubén en las dos orillas (2007); Habaneros de acá, de allá y del medio (2008); entre otros títulos de crítica literaria.  

En entrevista con Clarín.cl Ángel Esteban habla -en medio de los preparativos del lanzamiento internacional- de La estirpe del boom. De Gabo a Mario (2009) será editado en Latinoamérica por Planeta; Espasa ya había publicado la polémica investigación Gabo y Fidel: el paisaje de una amistad (2004) provocando todo tipo de comentarios, por ejemplo, el escritor canario Juan José Armas Marcelo dijo: «Se trata de un libro ferozmente indiscreto»; no esperamos menos en esta ocasión: Boom & cartas inéditas, pueden ser una «peligrosa» combinación.

[caption id="attachment_6515" align="aligncenter" width="350" caption="El critico literario Ángel Esteban"][/caption]  

MC.- ¿Cuántos epistolarios inéditos revisó para escribir su nuevo libro sobre el boom?

AE.- Los de Mario Vargas Llosa, de Carlos Fuentes, Julio Cortázar, José Donoso y Guillermo Cabrera Infante.

MC.- ¿En su mayoría son cartas donadas a Universidades? ¿Habría archivos protegidos con cláusulas para evitar que fueran leídos mientras los escritores vivían?

AE.- La mayoría son manuscritos vendidos a la universidad por parte del autor. Cuando una carta o un conjunto de ellas no quieren que se abran hasta cierta fecha, ellos mismos lo indican y esos papeles están cerrados al público. Así que yo he visto sólo aquellos que están abiertos a los investigadores.

MC.- El año pasado el crítico Julio Ortega editó una novela póstuma de José Donoso (Lagartija sin cola); y en el 2009 Pilar Donoso publicará el diario íntimo de su padre. ¿Este caso ejemplificaría la obsesión de saberlo todo sobre cada autor del boom?  

AE.- El boom ha sido el evento cultural y literario más importante del siglo XX en lengua española, y uno de los más relevantes de todo el mundo. No extraña, por tanto, que siga despertando interés, cuarenta años después.

MC.- Gabriel García Márquez, José Donoso y Mario Vargas Llosa vivían en Barcelona; teniéndolos en Cataluña, ¿cómo leían los jóvenes al boom en la España franquista? ¿Era un antídoto frente al dogma militar?

AE.- Yo no viví esa época. Cuando Franco murió apenas sabía leer y escribir. Pero me imagino que era un territorio de libertad y fantasía; sobre todo una manera nueva de concebir la escritura y la lectura, muy diferente al aburrido realismo clásico de la posguerra española.

MC.- ¿Qué representan Neruda, Rulfo, Asturias, Borges y Carpentier para la generación del boom?

AE.- Son los antecedentes inmediatos, y sin ellos no se explica el boom. Así lo contemplo en mi libro. Son los maestros indiscutibles del boom, y los que acuciaron a los jóvenes para que ofrecieran una nueva cara literaria.

MC.- Al hablar del quinto integrante en The Beatles nos remitimos a George Martin. ¿Podríamos hacer una metáfora de la importancia de Carmen Balcells en la exportación del boom?

AE.- Por supuesto. Es la Mamá Grande del boom, la que supo canalizar todos los esfuerzos literarios y difundirlos a los cuatro vientos, por todas las esquinas del planeta.

MC.- ¿Tiene algún autor o novela preferida del boom? ¿Carlos Fuentes es el escritor con el que más ha conversado?

AE.- Puedo mencionar muchas novelas favoritas: La ciudad y los perros, Cien años de soledad, El siglo de las luces... y el autor con el que más he conversado es, sin duda, Mario Vargas Llosa, con el que tengo una buena amistad. También la tuve con Guillermo Cabrera Infante, pero nos dejó hace un tiempo.

MC.- Junto al profesor Álvaro Salvador concluyeron el ejercicio de José Lezama Lima al preparar el cuarto tomo de la Antología de poesía cubana. ¿Qué valor tiene Lezama Lima en su doble faceta de poeta y novelista? ¿Qué otro autor del boom manejaba con destreza ambas estructuras?

AE.- Hay muy pocos autores que manejen bien las dos realidades. Creo que Lezama no es uno de ellos, porque sus novelas son eminentemente poéticas. Borges sí dominaba los dos estilos, como en la actualidad lo puede hacer un autor joven como Andrés Neuman.

MC.- ¿Ha recibido algún comentario de terceras personas –en Cuba y Colombia- sobre su libro Gabo y Fidel? ¿Qué conclusión destacaría de la investigación que hizo con Stephanie Panichelli?

AE.- He recibido cientos de comentarios, que incluso implican a los protagonistas del libro. Y no sólo en Cuba y en Colombia, también en España, Estados Unidos y el resto de América Latina. En general, creo que es un tema que alguien tenía que tratarlo, porque es evidente que esa relación llama poderosamente la atención. El mejor narrador y el último y más longevo dictador declaran públicamente su amistad.   

MC.- Finalmente, ¿cuándo regresará a Latinoamérica para presentar De Gabo a Mario? ¿Irá a Buenos Aires en abril? ¿O esperaremos hasta la FIL Guadalajara?

AE.- Todavía no hemos planeado una gira latinoamericana, aunque, evidentemente, la habrá. De momento, la presentación oficial será el 3 de febrero en Madrid, aunque la semana anterior El País sacará dos páginas dedicadas al libro.

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