Oaxaca, México.- Importantes avances económicos y sociales se registran en los 125 municipios con menor Índice de Desarrollo Humano (IDH), como resultado de la Estrategia 100 x 100, un esfuerzo coordinado por el Gobierno Federal para erradicar los rezagos históricos en materia educativa, salud e ingreso en Chiapas, Durango, Guerrero, Nayarit, Oaxaca, Puebla y Veracruz.
Desde el inicio de la administración del Presidente Felipe Calderón se estableció como prioridad transformar las condiciones de vida de las comunidades más marginadas del país, por lo que, en un esquema de coordinación entre los diferentes programas sociales federales, se han invertido 26 mil millones 329 mil pesos, de los cuales la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) ha aportado el 41 por ciento del total.
En educación, un ejemplo exitoso se observa en Santiago del Pinar, Chiapas, donde hoy el 91 por ciento de los niños entre 6 y 14 años asisten a la escuela, 30 puntos porcentuales más que en 2000. En 10 años, la población de 15 años y más con secundaria se elevó 15 veces en ese municipio.
En 2000, 20 de cada 100 niños de 6 a 14 años no asistían a la escuela en los 125 municipios con menor IDH; hoy la proporción es de 10 de cada 100, lo que habla de un avance considerable en este rubro. De manera similar, según la información publicada por el Censo de Población y Vivienda 2010, el grado promedio educativo en estos municipios se elevó de 2.9 a 4.2 años.
En acceso a los servicios de salud, también se han dado pasos importantes. En 2000 sólo 7 de cada 100 personas contaba con acceso a estos servicios, actualmente 57 de cada 100 personas tienen asegurada la atención médica. Otro caso de éxito. Hace 10 años el 99 por ciento de la población de San Pablo Cuatro Venados, Oaxaca, no tenía acceso a servicios de salud, hoy el rezago es de tan sólo el 8 por ciento, un avance de 91 puntos porcentuales en la actual administración federal.
Referente a pisos de tierra, entre 2000 y 2010 se logró reducir en más de 50 por ciento el rezago en los 125 municipios con menor IDH; lo que, entre otros beneficios, ha evitado enfermedades gastrointestinales en mujeres, niñas, niñas y ancianos. En 2000, 83 de cada 100 casas tenía piso de tierra, hoy la cifra ha disminuido a 30 de cada 100.
El municipio Filomeno Mata, Veracruz, es un caso notable en el abatimiento de pisos de tierra. Hace 10 años, el 82 por ciento de las viviendas carecían de piso de cemento, actualmente sólo hay un rezago de 5.6 por ciento.
Una característica común de las localidades que conforman estos municipios es que éstas presentan dispersión geográfica lo que las hace de difícil acceso. Aun así, las acciones de la Estrategia 100x100 para proveer de servicios básicos han dado resultados.
En servicios de agua entubada, drenaje y electricidad, también hay logros. En 2000, el 38 por ciento de las viviendas no contaba con red eléctrica, dicho porcentaje disminuyó 14 puntos porcentuales al 2010. Hace diez años, 58 por ciento de las viviendas no tenía acceso a agua entubada, actualmente el porcentaje se redujo en 13 puntos porcentuales.
En Camocuautla, Puebla, hace 10 años más de la mitad de las viviendas carecían de agua entubada, actualmente, con inversiones en infraestructura social básica, el rezago es solamente del 5.1 por ciento.
Con hechos no con palabras se avanza en la superación de los rezagos sociales, y a través de los programas de la Sedesol, como Oportunidades, se impulsa la formación de capital humano en los municipios con menor IDH, y con el Programa de Abasto Social de Leche se contribuye a la nutrición de niños, niñas, mujeres y ancianos, que viven en los 99 de los 125 municipios con menor IDH.
También, mediante el Programa de Desarrollo de Zonas Prioritarias y Piso Firme, la dependencia federal trabaja para atender los rezagos en infraestructura social básica y la carencia de servicios en viviendas, con el único propósito de elevar las condiciones de vida e insertar en el desarrollo a las comunidades más marginadas de México.
En educación, un ejemplo exitoso se observa en Santiago del Pinar, Chiapas, donde hoy el 91 por ciento de los niños entre 6 y 14 años asisten a la escuela, 30 puntos porcentuales más que en 2000. En 10 años, la población de 15 años y más con secundaria se elevó 15 veces en ese municipio.
