Oaxaca, México.- ¿Puede llamarse un estado democrático aquel que permite y enmascara las formas extremas de violencia de género contra las mujeres? La respuesta es NO. La violencia feminicida de que han sido víctimas Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, de 14 y 20 años respectivamente, desaparecidas en la región Triqui el 5 de julio de 2007, no puede llamarse más que crimen de Estado, porque la violencia “normalizada” en contra de las mujeres en la región está siendo solapada por las autoridades, específicamente por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Oaxaca.
El día 13 de julio de 2007, la madre de las hermanas Ortiz Ramírez acudió a denunciar ante el Ministerio Público de Putla Villa de Guerrero, la desaparición de sus hijas, originándose la Averiguación Previa No. 187/2007 por el delito de Privación Ilegal de la Libertad en su modalidad de .
Las familiares y las organizaciones que acompañamos su búsqueda, hemos tocado muchas puertas, la mayoría de ellas han permanecido cerradas, entre ellas están:
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[caption id="attachment_113466" align="alignright" width="199" caption="Foto: www.50mm.mx"][/caption]
Con fecha 24 de enero de 2008, los familiares presentaron una queja a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos por la desaparición de Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, pero ésta declino la responsabilidad a la Comisión Defensora de los Derechos Humanos de Oaxaca; este organismo inició de oficio, en el expediente CDDH/292/(18)/OAX/2008, una propuesta de conciliación consistente principalmente en “la ejecución de las ordenes de aprehensión”, misma que fue aceptada por la Secretaria de Seguridad Publica y el Gobierno del Estado, pero a la fecha dichas órdenes de aprehensión no han sido ejecutadas. No obstante, el 11 de mayo de 2009 la CNDH concluye que no existe materia para seguir conociendo del caso “toda vez que el organismo local ha efectuado la investigación respectiva y resuelto conforme a sus atribuciones respecto de los hechos motivo de su queja”.
- · La familia ha acudido innumerables veces a entrevistas con diferentes legisladores, gracias a lo cual el 12 de febrero del 2008, la Cámara de Diputados exhortó al Gobierno del Estado de Oaxaca para que atendiera la problemática de violencia contra las mujeres en la zona triqui, además de que realizara todas las medidas para coadyuvar con la pronta impartición de justicia en el caso de la desaparición: búsqueda, localización y rescate de dichas personas. Así mismo, se solicitó al Gobierno del Estado de Oaxaca, remitiera un informe en un plazo de 20 días sobre las acciones para atender los resolutivos del presente Acuerdo, cosa que tampoco se cumplió y que tampoco este nuevo gobierno ha hecho.
- · Los familiares se entrevistaron en cuatro ocasiones con el entonces Procurador, Evencio Nicolás Martínez Ramírez, para conocer de las investigaciones y avances en la solución del caso; su respuesta ha sido la misma: “es peligroso entrar a la zona y no voy a arriesgar a mi gente”, “se van a ejecutar las órdenes de aprehensión pero es complicado”, “me comprometo a emprender la búsqueda de las personas pero es difícil entrar a la región”. Hasta hoy el Procurador no ha dado respuestas satisfactorias a los familiares que lo único que le solicitan es que les informe de los avances de las investigaciones.
Hoy hacemos un enérgico llamado al Gobierno de Gabino Cué, al Procurador General de Justicia, para que asuman como asunto prioritario la búsqueda de Virginia y Daniela, que nos demuestren con hechos que si les interesa la vida de las mujeres, que si les interesa dar con el Paradero de Virginia y Daniela.
La pasividad con que han actuado las autoridades encargadas de impartir justicia en el estado de Oaxaca demuestra negligencia y simulación, solapando el feminicidio, por lo que hay elementos suficientes para presumir fundadamente la desaparición forzada de Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, pues de acuerdo con la Convención Interamericana sobre la Desaparición Forzada de Personas firmada por México: “…
se considera desaparición forzada la privación de la libertad a una o más personas cualquiera que fuere su forma, cometidas por agentes del Estado o por personas o grupo de personas que actúen con la autorización, el apoyo o la aquiescencia del Estado, seguida de la falta de información o de la negativa a reconocer dicha privación de libertad o de informar sobre el paradero de la persona, con lo cual se impide el ejercicio de los recursos legales y de las garantías procesales pertinentes”.
La impunidad con la que se han conducido los ejecutores de la desaparición de Daniela y Virginia sólo se entiende por la omisión y el silencio de las autoridades para cumplir con la labor que les exige su cargo de servidores públicos. Ante esta inactividad de las autoridades hoy nos preguntamos: ¿por qué no se ha emprendido la búsqueda de Daniela y Virginia, acaso porque sólo son mujeres, son indígenas y son pobres?¿Por qué las Comisiones de derechos humanos local y nacional se deslindan de la responsabilidad de la defensa de los derechos de estas mujeres?
Definitivamente estamos ante un Estado antidemocrático y misógino. El camino recorrido durante estos cuatro años ha sido intenso en la exigencia de la presentación con vida de Virginia y Daniela. En febrero de 2008 se realizó la campaña “Si no están ellas no estamos todas” y en julio del mismo año se llevó a cabo un foro con el mismo nombre, acompañado de la exposición fotográfica “Nuestros pasos para encontrar a nuestra hijas, compañeras y hermanas”. En las visitas de organismos internacionales a Oaxaca se ha denunciado la desaparición, y se ha mantenido informada a la sociedad gracias a la atención que los medios de comunicación han dado al caso. Al cumplirse cuatro años de la desaparición de Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, agradecemos a todas las personas que han acompañado este largo camino y les solicitamos se mantengan alertas a las respuestas de las autoridades.
Este gobierno no puede hacer que no ve, o que no escucha la voz de la familia, de la madre y de las organizaciones, es urgente asumir con hechos el discurso de convicción y respeto por los derechos humanos de las mujeres, le exigimos a Gabino Cué que el elocuente discurso frente a la Alta Comisionada de Derechos Humanos el día de ayer, lo lleve a la acción y que a la brevedad presente con vida a Virginia y Daniela Ortiz Ramírez.
¡Si no están ellas…no estamos todas!
¡Ni una desaparecida más!