Empresas violan ley con venta de bebidas adulteradas

Francisco Rosete Ramírez* Oaxaca, México.- Durante los últimos años se ha observado la proliferación de “bebidas alcohólicas” que de manera ilegal y abusiva se comercializan mediante imágenes, figuras, leyendas,  tipos y categorías que violan flagrantemente la Ley Federal de Protección al Consumidor y normas oficiales mexicanas que establecen los requisitos y especificaciones que se deben cumplir, previamente, para su comercialización. Entre ellas, las que se denominan “destilados, licores o  elixir  de agave”, las cuales se asocian a las bebidas alcohólicas que cuentan con una Declaración de Protección a la Denominación de Origen, como son el bacanora, mezcal y tequila. El problema no es menor. La SSA ha declarado al respecto, que de 40 a 50% de las bebidas alcohólicas que se consumen en México son de origen ilegal y clandestino; 25 millones de bebidas alcohólicas en el país incumplen con la normatividad, al menos, en lo relativo a su etiquetado y son originadas en “destilerías” clandestinas;  entre piratería y adulteración, se ha calculado que de cada 10 botellas que se consumen, 5 son de procedencia ilícita. Dichas bebidas alcohólicas evaden anualmente más de 500 millones de dólares. De acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor, entre 2010 y 2011, se comprobó que 82% de las bebidas que utilizan la marca agave presentan incumplimientos a las especificaciones establecidas, ocasionando que los consumidores sean engañados sobre su naturaleza y características. Para PROCONSUMIDORES A. C., el diagnóstico indicado constituye la violación sistemática y permanente de los derechos de millones de consumidores sin que, hasta la fecha, se visualicen medidas o disposiciones legales que lo impidan. A ello, habría que agregar la actitud complaciente de las autoridades encargadas de proteger y tutelar los derechos de la población consumidora, generando con lo mismo un sistema de impunidad que incrementa el conflicto. Ante dicho escenario, diversos sectores han intentado promover medidas-casi desesperadas ante la falta de respuestas- para frenar o abatir el problema. Entre ellas, una  declaratoria del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) para regular el uso exclusivo de la marca agave en bacanora, mezcal y tequila; pretensión que ha sido combatida por quienes producen esa clase de bebidas ilegales. El caso es que, mientras unos proponen y otros cuestionan, millones de consumidores quedan en medio, condenándolos a seguir siendo objeto de engaños y fraudes. Al respecto Francisco Rosete, Presidente de la Asociación, señaló que: “Es urgente que se cuente con un marco jurídico idóneo y adecuado para regular, efectivamente, la producción y comercialización de esa clase de bebidas alcohólicas. Eficiencia que dependerá de la actuación que tengan las autoridades correspondientes”. No se puede pasar por alto, dijo Rosete Ramírez, que ya en 2006 se expidió una norma oficial mexicana de emergencia cuyo objetivo se vinculó a los “destilados de agave”, sin que con lo mismo se hubiera evitado que se siguieran vendiendo a los consumidores por medio del engaño.

Por ello, para PROCONSUMIDORES, es preciso contar con una nueva NOM que establezca requisitos y especificaciones de carácter comercial y sanitario que responda a la realidad actual. El más importante, el de certificación respecto a la veracidad de dichos requisitos, pues de otra forma, seguirá lo mismo en perjuicio de millones de consumidores, vulnerables ante la carencia de normatividad y omisión de los responsables de su vigilancia y cumplimiento. Colateralmente, se seguirá depredando el mercado y agrediendo a la industria, principalmente a los pequeños productores que cumplen con la normatividad vigente de las Denominaciones de Origen, a través de la competencia desleal.

En México, terminó diciendo el Presidente de PROCONSUMIDORES, debe reivindicarse el concepto de “veracidad” que durante los últimos años se ha subestimado y hasta despreciado, creando con lo mismo una subcultura del engaño que acaba por pulverizar el Estado de Derecho. *Presidente de Proconsumidores A.C.