Oaxaca, México.- El país ha sufrido diversas transformaciones en el ámbito jurídico, uno de esos cambios ha sido la reforma constitucional en materia penal, que adopta un Sistema Acusatorio Adversarial, el cual tiene por objetivo dar certeza jurídica a las garantías individuales.
Oaxaca fue el primer estado en el país que inició el proceso de implementación de este sistema penal y, el segundo en entrar en funcionamiento, lo que coloca a la entidad como líder en su aplicación, y muestra de ello es que el resto de las entidades federativas han volteado hacia Oaxaca para aprender de la experiencia que tienen los operadores de este sistema.
En breve entrevista el licenciado Alejando Magno González Antonio, juez integrante de la Cuarta Sala Penal del TSJE, expresó que este nuevo procedimiento trajo consigo cambios importantes, como es el caso de los recursos, los cuales son instrumentos idóneos para garantizar el respeto a los derechos fundamentales del procesado.
Los recursos adoptados en el código procesal penal son tres: revocación, apelación y casación, los cuales ahora dejan de ser un medio de control jerárquico jurisdiccional y pasan a ser un instrumento a disposición de las partes.
González Antonio, señaló que este sistema recursivo obedece al derecho indispensable que tienen todos los ciudadanos de inconformarse con las resoluciones que dictan los jueces. Como es el caso del recurso de apelación tanto en el sistema tradicional como en el sistema acusatorio adversarial.
“Implica expresar agravios en contra del sistema tradicional o reproches en el caso del procedimiento oral, en donde se establecerán las razones por las que considera que la resolución le afecta y el porqué fue mal dictada”; asimismo, dijo que estos recursos se encuentran plasmados en tratados internacionales donde señalan que se debe establecer un sistema recursivo en los procedimientos para garantizar este derecho.
Cabe señalar que el sistema acusatorio adversarial, fue creado con la finalidad de ofrecer a la ciudadanía oaxaqueña una administración de justicia más ágil, transparente e imparcial y con apego absoluto a los derechos fundamentales. En este sentido, este procedimiento brinda muchos beneficios para las partes, todos enfocados en el respeto a los derechos humanos y a las garantías a un debido y justo proceso.
