Cámara nocturna, un acercamiento contemporáneo a Salvador Elizondo

Oaxaca, éxico.- La distancia temporal con la producción literaria y la vida de Salvador Elizondo (1932-2006) permitió que los ensayistas invitados para trabajar en el libro Cámara nocturna, dedicado al mencionado autor, desarrollaran una aproximación fresca y renovada a su obra. Conaculta, a través de la Dirección General de Publicaciones, presentó el libro, que forma parte del Fondo Editorial Tierra adentro, este domingo 26 de febrero en el marco de la 33 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, en la que estuvo presente el compilador de los textos Daniel Orizaga y el escritor David Miklos. El invitado a comentar esta obra señaló que la generación de ensayistas jóvenes como Orizaga se ha dado a la tarea de realizar una relectura de las obras de Elizondo. En esta ocasión se trata de once textos desarrollados por igual número de autores. Se trata de un homenaje al escritor, dijo, pero sobre todo es un modo de generar una relectura de sus cuentos, novelas, poemas, artículos y biografías ficcionadas. De esta manera, la invitación es a aproximarse a la obra elizoldeana bajo una nueva mirada, “porque los autores invitados, han analizado los textos del escritor bajo una óptica distinta a como se ha hecho antes, usando un lenguaje accesible, pero sin perder el rigor académico necesario para lograr un ensayo bien sustentado”. De acuerdo con Miklos, en el libro Cámara nocturna. Ensayos sobre Salvador Elizondo los autores invitados desarrollan una aproximación que puede considerarse como una tendencia actual del género, la cual surge de la propia experiencia al leer los libros analizados y que tiene la intención de ser guía para el lector. Otro elemento que destacó es que los autores cuentan con el paso del tiempo a su favor, pues esa distancia con la publicación de los libros les brinda la oportunidad de desarrollar una visión más clara sobre sus aportes y contenidos. “En conjunto, estos ensayos ofrecen al lector una serie de opiniones y puntos de vista sustentados en la propia experiencia de haber leído la obra de Elizondo, con lo cual se logra desmitificar a la figura histórica, algo que los contemporáneos del autor no hubieran podido lograr, justamente por la cercanía temporal con él. “Son varios los aportes de este libro al estudio y comprensión del escritor, pero sobre todo, establecen un diálogo muy actual con él, que demuestra que sus obras han llegado en plena forma hasta nuestros días, con una presencia literaria profunda, que está lista para que las nuevas generaciones de ensayistas nos ayuden a encontrarnos con sus aportes”.