Los sabores y colores de Santa María del Tule deleitan paladares

Oaxaca.- Nueve de la mañana en punto, doña Gabriela llega a la casa de “la patrona”, hoy con más entusiasmo, pues sus famosas empanadas formarán parte de una feria que se ha vuelto tradición.

  [caption id="attachment_29275" align="alignright" width="300" caption="El árbol de El Tule es uno de los principales atractivos turísticos. "][/caption] Su primera actividad del día es lavar el maíz para llevarlo al molino, mientras tanto doña Teresa –la patrona- hierve el pollo y prepara el mole amarillo: chile, ajo, cebolla, clavo, orégano y pimienta, los ingredientes principales. Se agrega masa, se mueve y minutos más tarde, está listo el delicioso y tradicional Amarillo.   Doña Teresa, explica que para preparar la empanada, “hay que servir el amarillo en una tortilla bajadita del comal, se agrega pollo, hierba santa y a comer se ha dicho”.   Desde temprana hora los comerciantes de Santa María el Tule arriban a la tradicional feria, empanadas de champiñones y flor de calabaza, quesadillas con tasajo, arroz y pasta de frijol complementan el menú que se ofrece a los visitantes, nacionales y extranjeros, llevándose un pedacito de Oaxaca el paladar.   La feria gastronómica comenzó el 22 de julio y permanecerá abierta hasta el lunes 30, los precios oscilan entre los 15 y 30 pesos con la finalidad de hacerlo accesible para cualquier bolsillo.   Así lo informó, Abel Ramírez Bautista, coordinador de la Feria de la Empanada, quien invitó a los habitantes de la capital del estado y pueblos vecinos, así como a los turistas a acudir a esta comunidad a disfrutar de este delicioso platillo. “A nuestros paisanos y a los turistas que nos visitan de otras partes de México y el mundo, vengan a nuestra feria, conozcan la muestra artesanal, disfruten un rico mezcal y admiren el monumental árbol del Tule”.   Por su sabor y sus colores, la Feria de la Empanada es una excelente opción para este fin de semana, recorrer las calles empedradas de una de las poblaciones emblemáticas de Oaxaca, conocer su iglesia y admirar la majestuosidad del ahuehuete más grande del mundo será una experiencia sin igual.