Paro de policías deja al decubierto corrupción de Esteva Salinas

Oscar VALDIVIESO: Oaxaca, México.- Por quinta ocasión, elementos policíacos iniciaron un paro de labores, solo que en esta ocasión de carácter indefinido, hasta que el gobernador Gabino Cué Monteagudo, destituya al Secretario de Seguridad Pública (SSPO), Alberto Esteva Salinas, quien ha utilizado recursos federales y estatales para su promoción personal a la gubernatura.   Esta grave crisis, tiene en total desprotección en materia de seguridad a la población de las ocho regiones del estado, toda vez que suman 2 mil 500 los policías inconformes que representan el 80 por ciento de la plantilla.   Los policías inconformes, mantiene tomada las instalaciones de la SSPO ubicadas en San Bartolo Coyotepec donde se han concentrado desde el domingo para exigir la salida de Esteva Salinas así como de la Directora de Recursos Humanos, Eloisa Arnaud Viñas, quien despide a policías como medida de represión así como del Director de Prevención del Delito, Higo López Velasco, dedicado a desviar recursos en actividades ajenas a la seguridad pública. Para el policía Vázquez, representante de los policías inconformes, demandó al gobernador Gabino Cué, ordene una inmediata auditoria para conocer el despilfarro de millones de pesos que realiza el Secretario de Seguridad y sus directores y que tiene a los policías, sin equipamiento y condiciones laborales dignas en todos los destacamentos del interior del estado. "Los policias  en las regiones no cuentan con patrullas, ni combustible, uniformes y las armanas de cargo, están inservibles", expuso Por otro lado, los policias desmintieron que se realicen cursos de capacitación ni mucho menos los famosos Gabinetes de Seguridad en las regiones, ya que son montajes para la foto y engañar al gobernador de que el dinero se esta aplicando para prevenir el delito". Cabe mencionar que Esteva Salinas gasta millones de pesos en impresión de calcomanías supuestamente para difundir valores, uniformes y patrullas con diseños copiados del extranjero, desfiles caninos, publicidad en periódicos, pago de avión y viáticos a invitados especiales que no tienen que ver con la seguridad de la población así como creación de grupos culturales obligando a los policías y asus familias a participar en ellos.