Crónicas beisboleras/ Columna 125

Jaime Palau Ranz Oaxaca, México.-   Finales de Zona. El cierre de temporada fue espectacular, cada juego fue peleado hasta el último out buscando pasar a la postemporada, la mayoría de los equipos tuvieron oportunidad de trascender y calificar aunque fuera para un último partido de cuarto contra quinto, este cambio hizo un milagro, que la liga se pusiera competitiva manteniendo el ritmo y la ilusión con miras a la gran final llamada la Serie del Rey. Los partidos clasifiactorios fueron dominados por quienes habían quedado en cuarto lugar en ambas zonas, esto dejó listos los enfrentamientos en la primera ronda de postemporada o semifinales de zona, entonces sucedió lo nunca visto, las cuatro series llegaron hasta el séptimo y definitivo encuentro, con resultado que tres de cuatro favoritos continuaron adelante, y por favoritos me refiero a que hubieran ocupado los puestos uno y dos de cada zona como los mejores durante la temporada regular, solo Diablos Rojos que había ocupado la primera plaza de la Zona Norte y de todo el béisbol mexicano con la mayor cantidad de victorias, fue derrotado por el número cuatro, los Toros de Tijuana, ¿cuál es mi punto de vista?, que en cuanto los escarlatas amarraron la calificación a postemporada y con tanta anticipación, bajaron el ritmo y perdieron algunos encuentros, ya se sabe que en el béisbol se puede ganar y perder algunos partidos y no pasa nada de fondo, el problema es cuál es tu actitud cuando tienes un conjunto tan superior y pierdes un juego y otro y otro, me pareció que el equipo pensaba que con tanta ventaja no era importante perder, no corría peligro la calificación ni pasaba nada, pero si pasó, perdieron esa ambición de ganarlo todo, su poderío espantaba a cualquiera donde se presentaban, solo que la oportunidad de calificar despertó en todos un efecto competitivo que les dio vigor y ritmo, eso emparejó la balanza de todos con quien era tan superior y se le apagó a Diablos esa chispita que detona a derrotar a cualquiera, los Diablos cuentan con un grupo de profesionales y mucha tecnología, llámese propietarios, directivos y cuerpo técnico, seguramente ya han analizado que pasó, donde se agotó el ánimo y en qué momento debe entrar el trabajo de refuerzo físico y psicológico, fue un revés muy doloroso que debe traer una enseñanza para los próximos años, ¿difícil de asimilar? si, máxime por la rivalidad entre hermanos existente, les aseguro que veremos un gran retorno en los próximos años. Este fin de semana inician las finales de cada zona, por la Norte, Acereros de Monclova en su casa contra los sorprendentes Toros de Tijuana, los primeros derrotaron a los Saraperos de Saltillo, ambos equipos tienen sede en el estado de Coahuila, es como un clásico del estado, no fue fácil para los acereros derrotar a esa batería tan poderosa como es la de Saltillo, solo que ellos no están mancos y también tienen lo suyo, además de contar con uno de los mejores lanzadores de la Liga, Josh Lowey quien dominó buena parte de la temporada liderando dos de tres departamentos de la triple corona (ganados y ponches) y en el tercero (carreras limpias) estaba en segundo lugar, siempre al acecho, al final solo quedó líder en ganados con trece triunfos, empatado con Duarte de los Diablos Rojos, de Toros de Tijuana podemos decir que aprovechó lo que hemos comentado líneas arriba, en su casa sacó los tres partidos y con obtener una victoria en el infierno, definió la eliminatoria, no queda más que felicitarlos, veremos quien los detiene, sus ánimos están por los cielos, si los mantienen pueden hasta ser campeones de la Liga, no va a ser fácil, van a salir chispas. En la Zona Sur llegaron a la final los dos mejores equipos, Leones de Yucatán y Tigres de Quintana Roo, por mucho dominaron a todos los demás y en la carrera parejera demostraron los yucatecos que tenían un mayor empaque, aguantaron el embate final, incluso la miniserie última de la temporada fue entre ellos y no se dejaron, dejaron fuera en la primera serie de postemporada a los Piratas de Campeche, el equipo más enrachado en llegar a las finales, de los últimos quince juegos ganó trece, regresó de séptimo hasta el cuarto lugar en poco tiempo, no era un flan y Yucatán logró domarlos, arrancan de favoritos en su casa, por el otro lado, Tigres se vio las caras con los Guerreros de Oaxaca, una vez más, es increíble que suceda cada año, la hegemonía que mantienen los de bengala ya empieza a ser preocupante, nuevamente les recuerdo que puedes ganar y puedes perder, pero cometer tantos errores a la defensiva y algunos tan increíbles que ya no es normal, es fruto de una presión mental adicional, son peloteros profesionales, son la elite, practican todos los días, ya no es coincidencia que se acumulen los errores en cada serie de postemporada contra Tigres, ya requiere de un trabajo psicológico de largo plazo, desde el inicio de la temporada el objetivo uno debe ser calificar y el dos derrotar a los Tigres, es un enfrentamiento que se debe anhelar con todas las ganas y deseos de vencerlos y nunca más rehuirle o ansiar evitarlos, no va a ser posible, el cambio empieza ahora y se va a cristalizar a partir del próximo año. Guerreros peleó hasta el séptimo juego gracias a su bateo oportuno, tenían todo, extraordinario trabajo de sus abridores, solo los errores los hundieron, Tigres supo atacar en ciertos momentos mas no tuvieron esa facilidad para hacer carreras que han mostrado a través de su historia, fueron oportunos mas no constantes, muchos bateadores fallaron con corredores en posición de anotar, deben mejorar urgente si quieren tener oportunidad contra los Leones, será otra serie donde saldrán chispas, vamos a disfrutar todos los encuentros. La próxima semana ya estarán definidos los equipos que llegarán a la Serie del Rey, el enfrentamiento entre la Norte y la Sur, quien gane será el campeón de esta temporada número noventa de la historia, de momento todos lo merecen, uno lo conseguirá, lo veremos. Si desea contactarme favor escribir a jpr.cronicas@gmail.com Facebook: Jaime Palau Ranz Tweeter: @jpranz Seguiré comentando la próxima semana.