Copelia MALLÉ
Oaxaca.- Hace 27 años nació Centéotl AC. Con emoción su fundador, Othón Cuevas agradece a las decenas de mujeres que creyeron en esta iniciativa ciudadana que hoy es una fuente de riqueza social y empleo digno en Zimatlán de Álvarez, donde tiene su sede y que se puede considerar como modelo de desarrollo sostenible y comunitario.
Teniendo al amaranto como bandera, que recuerda las raíces culturales de sus ancestros zapotecas, cientos de mujeres han tejido una red de apoyo comunitario que incluso ha sido reconocida por organismos internacionales por revivir al amaranto como un alimento de impacto social y económico.
Othón Cuevas cuenta que hace 20 años pusieron en marcha un proyecto para el rescate del amaranto, un alimento con toda la riqueza nutritiva y cuyo cultivo como alimento básico se estaba perdiendo en la diesta de las comunidades aledañas a Zimta los valles de Zimatlán.
Y aunque en un principio nadie creía que éste proyecto progresaría, a la distancia de dos décadas, decenas de mujeres y hombres han logrado consolidar
"Amaranto de Mesoamérica", una cooperativa considerada como empresa de economía social de beneficio social y nutricional de miles de familias en la región de Valles Centrales de Oaxaca
Este sábado Cneteotl A.C. llevó a cabo un Encuentro de Mujeres Promotoras para el consumo de este alimento en decenas de presentaciones que ahora ya se comercializan, incluxo en grandes cadenas de supermercados.
Por otro lado estas mujeres, han logrado consolidar el programa Bacomunidad a través del sistema de colmenas, que con financiamiento solidario impulsa las empresas familiares con la producción y comercializaciópn de alimentos a base del amaranto.
Para Othón Cuevas, el amaranto , alimento cotidiano en la dieta de las culturas mesoamericas, esta voviendo a resugir gracias al esfuerzo y solidaridad de mujeres para proponer a la sociedad oaxaqueña, regresar a sus ráices ancestrales con el consumo de un alimento sano.