Los medios alternativos para romper la inequidad informativa

Por Lilia Torrentera G.

Oaxaca, Oax.-  Al igual  que sucede con la perspectiva de género, las problemáticas que padecen los diferentes sectores sociales en estado y el país, no están reflejadas en los medios de comunicación, principalmente comerciales, por lo que para romper con el status quo, la ciudadanía de optar por crear medios propios de información alternativa, expresó Soledad Jarquín Edgar, Premio Nacional de Periodismo 2007.

Durante la cuarta sesión del Taller de Periodismo Creativo, con el tema crónica y literatura que organiza las Universidades de la Tierra y de Swarthmore, Pennsylvania, la periodista oaxaqueña expuso que en México, mujeres, jóvenes, pueblos indígenas, obreros, personas de la tercera edad y los movimientos sociales, padecen de un grave delito que es la omisión perpetrado diariamente por los  medios de comunicación.

Jarquín Edgar narró cómo hace 20 años, un grupo de periodistas preocupadas por esa omisión para sacar a la luz pública los graves problema que aquejan a las mujeres, se dieron a la tarea de romper con los moldes del periodismo establecidos en las redacciones y crearon sus propios medios de comunicación parta difundir con precisión la información con perspectiva de género.

Señaló que en esa omisión están inmersos los intereses del poder político y económico que permean los diarios locales y nacionales que manejan la información para inventar una realidad, que es ajena a los verdaderos problemas de los ciudadanos.

La corresponsal en Oaxaca de CIMAC-Noticias, advirtió que al crear un medio alternativo, la subjetividad que como sucede en todo el periodismo, estará presente en la información que se difunda, porque en ella se reflejarán la percepción, emociones, formación académica e ideología de quién escribe.

Es por ello que convocó a los participantes en el taller, a ejercer un periodismo creativo en el que se narren los problemas y los acontecimientos cotidianos, siempre apegados a los hechos, sin perder la pasión, pero tampoco sin caer en la omisión en la que todavía estamos inmersos en esos medios que no cumplen con su responsabilidad social.

En un emotivo ejercicio para hacer crónica de los vivido en el movimiento social del 2006, los participantes, sin darse cuenta que lograron esa conexión entre periodismo y literatura.