· Las concentraciones de bióxido de carbono son las más altas de los últimos 800 mil años y las temperaturas las más elevadas de los últimos dos mil, señaló el director del CCA de la UNAM Carlos Gay García
· En la actualidad, es el problema ambiental más importante que enfrenta la humanidad dijo en el seminario Colapsos ecológicos, sociales y económicos
Oaxaca, México.- Los gases de efecto invernadero han ocasionado que en los últimos 50 años la temperatura global se haya elevado 0.13 grados por década, lo que significa que dentro de 100 años alcanzará 1.3 grados por encima del rango normal, aseguró el director del Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA) de la UNAM, Carlos Gay García.
El cambio climático, señaló, en la actualidad es el problema ambiental más importante que enfrenta la humanidad. Según estudios, el calentamiento global, a partir del siglo XX, ha sido causado por las concentraciones de efecto invernadero de origen antropogénico, es decir, ocasionadas por el hombre.
Al participar en el seminario Colapsos ecológicos, sociales y económicos, expuso que el bióxido de carbono, producido por combustibles fósiles como la gasolina, el petróleo, y el gas natural, entre otros, contribuyen a las concentraciones atmosféricas de esos gases.
[caption id="attachment_3685" align="aligncenter" width="500" caption="John Saxe-Fernández, Norma Blázquez y Víctor Flores Olea, en el seminario Colapsos ecológicos, sociales y económicos, en la Torre II de Humanidades de la UNAM."][/caption]
En el auditorio Mario de la Cueva de la Torre II de Humanidades, indicó que según el Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) puede decirse, con un 90 por ciento de confianza, que el calentamiento global en el siglo pasado se debió a esas concentraciones antropogénicas.
Asimismo, señaló que las concentraciones de bióxido de carbono son las más altas de los últimos 800 mil años y las temperaturas actuales son las más elevadas de los últimos dos mil.
Añadió que es necesario que los gobiernos inviertan en investigación y en desarrollo tecnológico para llevar a cabo estudios a profundidad, y que se interesen por este problema.
Comentó que la UNAM trabaja en un programa nacional de indagación sobre cambio climático, cuyos temas son de importancia tanto para la sociedad en general, como para la comunidad científica.
En el acto inaugural, la directora del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH), Norma Blázquez Graf, manifestó que este seminario aborda los grandes problemas del mundo, como las crisis económicas y financieras actuales.
A su vez, Víctor Flores Olea, coordinador del programa El mundo en el siglo XXI, junto con John Saxe-Fernández, comentó que el término “Colapsos” en este seminario, estuvo bien empleado, pues al estar en el inicio del siglo XXI, “se vive en estos terribles colapsos que se han venido anunciando”.
Otros que también se vislumbran desde hace tiempo podrían llegar a sus extremos de manifestación, como la cuestión ecológica y los trastornos en materia económica, política y social; ya han hecho acto de presencia en el orbe, aseguró.
Ecuación energética global
Por su parte, Michael Klare, del Five College Program, Hampshire Massachusetts, Estados Unidos, al referirse a La geopolítica de la energía bajo condiciones de crisis económica, aseveró que en esa nación se utiliza más petróleo que en cualquier otro país, aproximadamente una cuarta parte del consumo global, equivalente a 21 millones de barriles de un total de 85 millones que se consumen por día en todo el mundo.
[caption id="attachment_3686" align="aligncenter" width="500" caption="Estados Unidos utiliza la cuarta parte del consumo global de petróleo, señaló Michael Klare, del Five College Program, Hampshire Massachusetts."][/caption]
El especialista dijo que países como el vecino del norte y China, requieren grandes cantidades de petróleo. EU importa cerca del 60 por ciento del hidrocarburo que consume, y la nación asiática, aproximadamente el 50 por ciento; se cree que ambos llegarán al 70 por ciento de dependencia para el año 2030.
Añadió que el 70 por ciento del consumo del crudo estadounidense es usado para el transporte, y de ese total, dos terceras partes son utilizadas por vehículos particulares.
Según un informe de la Agencia Internacional de Energía de París, vinculada con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la tasa de declive de los yacimientos actuales es de nueve por ciento anual, es decir, el doble de las aproximaciones más recientes de ese mismo organismo.
De igual forma, subrayó que este informe indica que la época dorada del petróleo ha terminado y ahora sólo queda esperar el crepúsculo.
“Será una suerte si en los próximos cinco años la industria logra producir un máximo de 95 millones de barriles diarios, pues de lo contrario, estaría por debajo de la demanda proyectada para el año 2030, de 112 millones de barriles por día”, apuntó.
Con respecto a la actual crisis económica, indicó que la última causa de ésta fue la combinación de especulación hipotecaria en EU, menor cantidad disponible de petróleo en el mercado mundial, y el incremento en su precio.
Esta depresión, abundó, tendrá un impacto profundo sobre la trayectoria futura del comportamiento energético global. Deberá pasar largo tiempo para que los precios del petróleo sean lo suficientemente bajos, y las hipotecas accesibles, para que quienes poseen una casa contemplen la posibilidad de mudarse hacia los exurbios –zonas residenciales fuera de la periferia de las ciudades–.
De igual forma, se registrará un descenso en la adquisición de automóviles y bienes raíces por parte de las clases medias emergentes de China, India, y otras naciones en vías de industrialización. Michael Klare hizo énfasis en que los inversionistas de Estados Unidos y Europa cancelan proyectos para realizar mayores inversiones en energía renovable. Para cuando la crisis económica haya disminuido un poco, se podrá observar una lucha global cada vez mayor sobre éstos, concluyó.