De la Redacción
Oaxaca, México.- Con un urgente llamo a formular políticas públicas para la salud y el medio ambiente para la población a nivel mundial, inició en la ciudad de Mérida, Yucatán el Foro Internacional de Ecosalud 2008.
En este foro al que asisten representantes sociales, científicos, académicos, investigadores de 82 países, se analizarán once grandes problemas que serán abordados durante el encuentro internacional.
"Desarrollo internacional, salud comunitaria y medio ambiente", "Cambio Climático y ecosalud", "Medicina de conservación", "Enfermedades emergentes y reemergentes", "Transformaciones agrícolas, biodiversidad y salud humana" y "Ecosistemas y contaminación ambiental".
Asímismo, se analizará "Ecosalud en el ambiente urbano", "Políticas, valores y dimensiones éticas y culturales de los derechos a la salud y al medio ambiente", "Gobernanza para la ecosalud", "Desarrollo de capacidades para la aplicación de métodos integrados en ecosalud" y "Océanos saludables, comunidades saludables".
Desde hacer frente a la gripe aviar en Asia, pasando por controlar la propagación de la malaria en México, hasta proteger la salud de las comunidades andinas en la industria de la producción de flores cortadas del Ecuador, el International Development Research Centre (Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo; IDRC, por sus siglas en inglés) y organizador de este encuentro mundial, está cambiando la forma en que el mundo piensa acerca de la salud y del medio ambiente.
Los participantes al Foro compartirán los hallazgos sobre cómo los enfoques de ecosalud pueden hacer frente a cuestiones globales apremiantes, tales como el cambio climático, la seguridad alimentaria, la enfermedad y el desarrollo económico.
Los socios del IDRC — incluidos muchos investigadores canadienses — han asumido importantes papeles de liderazgo en este nuevo campo científico, que reconoce la vinculación entre los humanos y su ambiente; y busca soluciones de desarrollo que protejan tanto la salud de los humanos como los frágiles ecosistemas de los cuales dependen. Durante la última década, los investigadores respaldados por el IDRC han empleado enfoques de ecosalud para mejorar la salud y los ambientes de las comunidades más vulnerables del mundo:
— México abandonó el uso de DDT para controlar el flagelo de la malaria en Oaxaca en sólo tres años, a la vez que redujo drásticamente las tasas de infección en una proporción uno a tres.
La pulverización con DDT fue reemplazada por el tratamiento de los criaderos de mosquitos. La eliminación del DDT permitió que México cumpliera con sus obligaciones con el Tratado de Libre Comercio de América del Norte antes de lo previsto.
— Los investigadores de Indonesia, Vietnam, Tailandia y la China se están concentrando en las raíces ambientales y agrícolas de la gripe aviar, como el papel de las aves migratorias y de los pollos domésticos en su propagación. También están explorando diferentes medidas para controlar la enfermedad a nivel de la comunidad;
— A medida que la industria de la producción de flores cortadas en el norte del Ecuador se vuelca cada vez más a las exportaciones, las nuevas granjas de alta tecnología que usan grandes cantidades de pesticidas y agua, han despertado
Te podría interesar...
Esta conversación es moderada acorde a las reglas de la comunidad “Ciudadanía Express” . Por favor lee las reglas antes de unirte a ella.
Para revisar las reglas da clic aquí