Greenpeace México
Oaxaca, México.- En Copenhague, el número de organizaciones civiles ha sido recortado frente a la asistencia de líderes mundiales a la Cumbre del Clima; Greenpeace dice que el tiempo para jugar póker con el destino del planeta ya se terminó.
Restringir la participación de la sociedad civil en la Cumbre del Clima de la ONU que se realiza en Copenhague es un signo que todo acabará con una serie de discursos poco sinceros, en sesiones de fotos y un texto sin compromisos reales y efectivos para salvar el clima.
[caption id="attachment_37534" align="alignleft" width="300" caption="La sociedad civil, sin presencia en la Cumbre del Clima"]
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El número de organizaciones civiles ha sido recortado frente a la asistencia de líderes mundiales a la cumbre del clima, pero lo que cuenta al final es que haya un acuerdo justo, ambicioso y legalmente vinculante, que le dé un giro a esta cumbre que dialoga detrás de un muro de seguridad.
El riesgo es que en estas condiciones se obtenga un resultado cómodo tipo G8 o G20, que al final nunca pasará la prueba de implementación.
La gente en todo el mundo exige que los jefes de Estado que tomen responsabilidad personal para apartar el cambio climático catastrófico.
Más de 10 millones de personas en todo el planeta demandan que los jefes de Estado lleguen a un acuerdo que sí haga frente al cambio climático. Ellos no serán sobornados con un acuerdo que sólo sea maquillaje verde.
El llamado para un acuerdo verdadero no empezó en Copenhague y tampoco terminará aquí. Si los líderes piensan que ellos eliminar la crítica, están equivocados.
Lee en nuestro blog a Gustavo Ampugnani, desde Copenhague
Mira la fotogalería de Greenpeace rumbo a Copenhague