En México, inequidad en el acceso a la educación en niñas y jóvenes

UNAM/Educación

Oaxaca, México.- A nivel nacional, acotó, 10.1 por ciento de las niñas entre 14 y 17 años no reciben ningún tipo de instrucción, en comparación con la Ciudad de México, donde sólo el 1.7 por ciento está en esa condición, aseguró la catedrática del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la UNAM, Aurora Loyo.

En tanto en  el Distrito Federal, 40 mil niños entre cinco y 14 años no disponen de recursos para asistir a la escuela, en tanto que el 4.3 por ciento de los jóvenes entre 14 y 17 años no estudia ni trabaja,

[caption id="attachment_26116" align="alignleft" width="300" caption="La inequidad dramática para que niñas y jóvenes accesan al derecho a la educación/Foto: www.oaxacapost.com"][/caption]

En el marco del ciclo de conferencias Temas Actuales de la Sociedad Mexicana, apuntó que mientras los jóvenes que cursan una licenciatura en el Estado de México representan el 6.6 por ciento de la matrícula inscrita a nivel nacional, en la capital la cifra asciende a 16.6 por ciento.

 

 

Respecto a la pobreza alimentaria, la especialista señaló que según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), ésta la padece el 18.2 por ciento de la población total, en tanto que en la capital, la cifra es del 5.4 por ciento.

A su vez, la académica del IIS, Lorenza Villalever, expuso que entre los principales retos que enfrenta la educación media superior (EMS), está la cobertura y la equidad. A la EMS sólo ingresa el 60 por ciento de la población en edad de cursarla, es decir, seis de cada 10 jóvenes de entre 15 y 18 años de edad.

En la conferencia ¿Hacia dónde va la educación en México?, destacó que en el país, históricamente, la matrícula de bachillerato ha sido la más prestigiada y a la que todos los jóvenes desean ingresar, y desde hace 30 años es la que más población contabiliza.

Un porcentaje muy bajo de jóvenes entre 15 y 18 años de edad se dedican exclusivamente a estudiar, mientras el resto se ve en la necesidad de trabajar para contribuir con los gastos del hogar, concluyó.