Marisela ARIZMENDI C/Conaculta
Oaxaca, México.- El Museo Nacional de Arte (Munal) de INBA-Conaculta ofrece una nueva forma de ver al reconocido polígrafo Alfonso Reyes (1889-1959): desde los pinceles. Con la exposición
Alfonso Reyes y los territorios del arte, se conmemoran el 120 aniversario del natalicio y 50 años del fallecimiento del escritor, filósofo y poeta regiomontano, ocurrido el 27 de diciembre de 1959.
La exposición, en la que se reúnen 182 obras entre pinturas, dibujos, grabados, esculturas, libros, revistas, periódicos y cartas referenciadas, presenta las impresiones estéticas de Alfonso Reyes en diferentes etapas de su vida, tanto en México como en Europa y Sudamérica, así como testimonios de autor y otros intelectuales contemporáneos sobre el arte de su tiempo.
[caption id="attachment_38040" align="alignleft" width="200" caption="A 50 años de su fallecimiento, se recuerda el legado de Alfonso Reyes"][/caption]
Alfonso Reyes y los territorios del arte
da cuenta de los testimonios que el escritor legó en diferentes etapas de su vida literaria, es decir, entre 1908 y 1959. El año de 1908 es el punto de partida porque es la fecha en que Reyes escribe su primer texto importante sobre crítica de arte: Julio Ruelas subjetivo, que publicó en la Revista Moderna. El año de 1959 refiere a la fecha de su muerte.
Al propio tiempo el Museo Nacional de Arte exhibe cintas sobre el escritor regiomontano.
Derivado de la muestra se editará un catálogo en el que participarán especialistas quienes abordarán la relación de Alfonso Reyes con las artes plásticas y el cine desde diferentes perspectivas. Entre los expertos están Héctor Perea, Adolfo Castañón, Alicia Reyes, Christopher Domínguez Michael, Fernando Curiel, Fernando Corona, Manuel González Casanova, Aurelio de los Reyes, Minerva Margarita Villarreal, Arturo López y Raquel Tibol, con un texto publicado en la revista Proceso, el 7 de diciembre de 1981.
La exposición
Alfonso Reyes y los territorios del arte, en el Museo Nacional de Arte, Tacuba 5, Centro Histórico, permanecerá abierta al público hasta el 14 de febrero de 2010.
En ocasión de estas dos conmemoraciones Emmanuel Carballo, Adolfo Castañón, José de la Colina y Francisco Prieto hablan sobre el legado de Alfonso Reyes en entrevista con Conaculta.
Emmanuel Carballo afirma: “Alfonso Reyes es de los pocos milagros que se han dado en territorio mexicano en el siglo XX. Tenía el don de la palabra. Es el hombre que supo darle al lenguaje un nicho específico que antes no había sido dado por nadie. La forma de su decir no tiene paralelo en la literatura mexicana y en la latinoamericana”.
Por su parte, el autor de origen español que ha adoptado a México como su patria, José de la Colina (quien reside en nuestro país desde 1940) considera que se debe evocar su papel como constructor de una literatura mexicana con una esencia universal.
“Supo traer –refiere José de la Colina– esa cultura universal a las páginas mexicanas. Lo hizo con un estilo llano, fácil de leer y agradable. Creo que esa fue su mayor virtud, su capacidad de poner en una prosa extraordinaria una cultura universal. Esto es lo que le debe la literatura en general y los lectores a Adolfo Reyes”.
Adolfo Castañón, por su parte consideró de Alfonso Reyes: “Su ascendiente como escritor que renueva la prosa, como poeta que domina las formas clásicas, su entrega indiscutible a la vocación literaria, su don de cordialidad y su superioridad en el plano de la crítica y de la erudición han hecho de su figura una de las cifras más complejas y representativas de la inteligencia americana”.
En tanto, para Adolfo Castañón, ganador del Premio Xavier Villaurrutia en 2008, Reyes es el creador de una vasta obra que resulta legible en cualquiera de sus páginas, léanse textos como
Visión de Anáhuac,
Ifigenia cruel,
Vísperas de España,
Calendario,
Junta de sombras, y hasta su animada correspondencia –por ejemplo con Pedro Henríquez Ureña–. Son libros y obras, insiste, de cuya lectura pueden sacar provecho todas las generaciones.
Mientras que para el novelista de origen cubano Francisco Prieto asegura que Alfonso Reyes fue, es y seguirá siendo un personaje inspirador de infinitos estudios e investigaciones, ya que su obra es tan peculiar que seguirá arrojando nuevas visiones: “No todo está dicho sobre él, aún queda mucho por explorar”.
Reyes, maestro de escritores
Alfonso Reyes, quien fue uno de los fundadores del Ateneo de la Juventud (grupo de intelectuales que compartían una visión moderna de México) en los albores del siglo XX, es una consulta obligada para quienes eligen el oficio de la pluma. Si bien no se trata de que los escritores imiten su estilo, sus libros sí son una escuela donde se puede aprender sobre el uso adecuado del lenguaje.
Emmanuel Carballo, quien tuvo el privilegio de ser amigo de Reyes (cenaba con él todos los martes en su casa), está convencido que la mejor enseñanza que este autor le sigue dando a los escritores es que se dediquen en cuerpo y alma al oficio.
“Reyes fue producto de la paciencia; dedicó muchos años de su vida para escribir todos los días. Dividía su vida entre leer y escribir. Si los escritores enriquecieran su bagaje leyendo primero los libros de su lengua y luego los de otras naciones se cumpliría el sueño más profundo de Reyes”, señala Emmanuel Carballo.
Y agrega: “Reyes no es un escritor para mayorías, sino para minorías. José Vasconcelos o Martín Luis Guzmán sí pueden ser para las masas. Reyes es un escritor para escritores, cosa que es sumamente importante en este país. No tiene por qué ser escritor para mayorías. Así como hay distintos quesos para distintos paladares, Reyes es para paladares exquisitos o para paladares que apenas se van a formar”.
Francisco Prieto, quien radica en México desde su infancia, considera oportuno que las reflexiones de Reyes (miembro fundador de El Colegio de México), deben expandirse y no limitarse al círculo literario, ya que sus conocimientos sobre la cultura mexicana fueron y siguen siendo significativas en nuestros acontecer nacional.
Desde su punto de vista, la promoción de sus libros es el vehículo idóneo para lograr este propósito. Hace una mención especial de la antología
Universidad, política y pueblo que coordinó José Emilio Pacheco. Para Prieto este compendio es relevante por el contenido, ya que Reyes coloca a la cultura como un elemento vital para el pueblo.
“Este sentido vital de la cultura, de no perder lo que representa la formación en las humanidades, para mí es de lo más fundamental de resaltar en Reyes. Se habla tanto hoy en día de preparar al hombre para la tecnología, para las lenguas extranjeras y se olvidan que lo importante es que las personas deben desarrollar una conciencia y no pecar de ignorantes”.
Por este aporte cultural, el también periodista considera que debiera promoverse más la obra de Alfonso Reyes en las escuelas, empezando desde nivel de secundaria hasta la universidad. Está convencido que en esta tarea, la intermediación de los maestros es fundamental para llevar a los alumnos de la mano por los caminos literarios del autor regiomontano.
“Si nosotros lleváramos a nuestros muchachos por la obra de Reyes desde la secundaria, los maestros lograrían contagiarlos con su pasión por esta literatura. Es un autor muy clásico que no requiere tener un diccionario a la mano para leerlo y comprenderlo. Sus libros deben ser llevados a las aulas y encontrar el centro vital para lograr una empatía con los jóvenes. Estoy convencido que a Reyes tan sólo hay que prestarle atención para gozarlo”, expresó Francisco Prieto.