Oaxaca, México.- La Ley de Ingresos de la Federación para 2010 aprobada por la Cámara de Diputados es limitada incluso para resolver los problemas “habituales de la economía mexicana”, porque en lo esencial recurre nuevamente al incremento de los impuestos en momentos en que las economías de todo el mundo los reducen.

  Así lo afirmó el doctor Federico Novelo Urdanivia, profesor-investigador del Departamento de Producción Económica de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quien agregó que es probable que el incremento de uno por ciento al Impuesto al Valor Agregado (IVA) fuera pactado entre el gobierno y el PRI, antes de la propuesta original de 2 por ciento al consumo, incluido en alimentos y medicinas.

[caption id="attachment_31653" align="alignleft" width="300" caption="Gobierno y PRI pactaron aumento al IVA, afectando a millones de mexicanos"][/caption]

El académico de la Unidad Xochimilco aseveró que dicho aumento en el IVA es regresivo, por más que se argumente que se trasladará a los pobres, porque “la mediación para esa transferencia radica en programas que el Gobierno Federal maneja, como es el caso del Seguro Popular o el de Oportunidades.

 

 

  La elevación del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y ampliar la cobertura de la recaudación provocará que los pocos “que pagamos impuestos simplemente paguemos más”, lo que a su vez generará problemas en términos del consumo y de la escasez de incentivos para promover la inversión y “recuperar algo de los empleos que se han perdido”.

Al referirse a los gravámenes especiales a ciertas industrias señaló que estos incrementos pueden generar un problema serio, sobre todo para aquellos que han sido competitivos en la apertura económica, como la industria cervecera.

El doctor Novelo Urdanivia indicó que esta continuidad en un modelo que frena la inversión y el empleo radica en el “fundamentalismo de mercado”, en el que los gobiernos del país siguen creyendo desde hace más de 25 años, a pesar de que “quienes lo inventaron ya cambiaron de opinión”.

  Basta observar, agregó, la apología que del libre mercado hizo el Jefe del Ejecutivo en la última reunión del G-20 cuando quienes le escuchaban están aplicando en sus países medidas proteccionistas.

  Es evidente, apuntó, que en esta coyuntura México necesitaba designar acciones contracíclicas, por ejemplo, “cambiar la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, la cual prohíbe el déficit y limita la autonomía del Banco de México en la toma de decisiones”.

  De nuevo se pospuso la oportunidad de impulsar una reforma fiscal progresiva, que debe entenderse en dos vías: cómo se recauda y cómo se gasta, y en ese sentido lo que el gobierno cuidará más en términos de gasto será ese tipo de programas que son electoreros.