UAM/Comunicación
Oaxaca, México.- El uso extendido de las novedosas tecnologías está dando paso a la creación de nuevos entornos técnico-comunicativos entre los individuos, circulando información “que no sabemos a dónde va a parar”, señaló el doctor Jesús Martín Barbero, investigador de la Universidad Nacional de Colombia, en debate organizado en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
En esta actividad, el catedrático -quien recibió el reconocimiento de estudiantes, académicos y autoridades de la Unidad Xochimilco por sus aportaciones en el campo de la comunicación y la cultura- aseguró que este “entorno informático”, en el que hoy “google sabe más de mí que yo”, adquiere cada vez más características de “un ecosistema”.
[caption id="attachment_33042" align="alignleft" width="300" caption="Las nuevas tecologías y los nuevos entornos comunicativos "][/caption]
En el encuentro con académicos de la UAM y de otras instituciones, el filósofo y antropólogo aseveró que la sociedad está entrando no al uso de un medio más de comunicación, sino a contextos distintos de lo que fueron los ambientes natural y urbano del individuo.
A diferencia de los entornos propiciados por la radio y la televisión, en los que el sujeto tenía la oportunidad de prender y apagar el aparato; esta nueva tecnología “no la podemos manejar igual”, sentenció el investigador para quien el riesgo de la circulación de esta información radica en el uso que se le pueda dar.
El doctor Martín Barbero advirtió que los estudios culturales en América Latina viven una “despolitización”, que no se debe a las investigaciones en sí, sino a la estructura de la academia estadounidense, en la cual han tenido su desarrollo más notable.
Hoy estos análisis “son un lío”, porque son subalternistas, poscoloniales, decoloniales y están relacionados con la estructura de competitividad académica, originando que en un foro de expertos se dé más importancia a su asistencia a una universidad, que al tiempo que se les da para escuchar sus opiniones.
Esta despolitización, afirmó, está vinculada con la estructura académica de los grupos docentes e incluso de sus ideologías; sin embargo, reconoció que son los estadounidenses de los pocos que han realizado estudios de las culturas de las clases medias.
Al abordar el tema de “lo popular”, indicó que los neocomunismos venezolano, ecuatoriano y boliviano “son culturalmente una estafa” y nada tienen que ver con los comunismos históricos de Lázaro Cárdenas del Río, en México; Juan Domingo Perón, en Argentina o Getulio Vargas, en Brasil.
En aquellos gobiernos se descubrió de qué estaban hechas las culturas nacionales, cuando éstas eran las de las mayorías.