·        Con un modelo novedoso, Joel Cracraft, del Museo Americano de Historia Natural, une biología, genética, geología y ecología para rastrear los linajes de las especies

·        El ornitólogo ofreció una segunda conferencia en el Jardín Botánico del Instituto de Biología de la UNAM

UNAM/Medio Ambiente

Oaxaca, México.- Con un novedoso esquema que estudia el pasado y presente de las especies a partir de la multidisciplina, el ornitólogo estadounidense Joel Cracraft, del Museo Americano de Historia Natural, rastrea los linajes de diversas variedades vegetales y animales para explicar su evolución y extinción a partir no sólo de sus características físicas y genéticas, sino también de su entorno.

Condiciones geográficas como la presencia de un río o una selva; geofísicas, como el nacimiento de un volcán o la ocurrencia de un sismo, y atmosféricas (o cambios climáticos drásticos en un ecosistema), se integran al trabajo del investigador en un conjunto de relaciones interconectadas en el tiempo y espacio.

[caption id="attachment_22937" align="alignleft" width="202" caption="Joel Cracraft del Museo Americano de Historia Natural."][/caption]

Cracraft explicó su método ante estudiantes e investigadores en la segunda conferencia que ofreció en la UNAM, titulada Pensando en la diversificación, el ensamblado taxonómico y la biogeografía de la biota sudamericana, celebrada en el auditorio del Jardín Botánico del Instituto de Biología (IB).

 

 

Ampliar la biogeografía

El biólogo estadounidense, quien además es curador de la Colección de Ornitología del Museo Americano de Historia Natural, con sede en Nueva York, tiene especialidad en biogeografía, ciencia que estudia la distribución de los seres vivos sobre la Tierra, así como los procesos que la han originado, la modifican y la pueden hacer desaparecer.

Esta disciplina es parte de la biología y suma información de especies relacionadas con su genética, su ecosistema y las ciencias de la Tierra que participan en su entorno.

“El del doctor Cracraft es un modelo novedoso que realmente toma en cuenta la complejidad de la realidad biológica, porque la diversidad del planeta está influenciada por varios factores, y se requiere un nivel de análisis y de herramientas computacionales que no hay en ninguna universidad del mundo”, comentó la doctora Tila María Pérez, directora del IB y asistente a la ponencia.

Sistema de Informática para la Biodiversidad y el Ambiente

Ante la urgencia de contar con un soporte informático para este tipo de estudios, la directora del IB comentó que la UNAM ya trabaja sobre este tema en el Macroproyecto Sistemas para la Biodiversidad y el Ambiente (SIBA).

“El SIBA intenta desarrollar herramientas computacionales para integrar y analizar datos no sólo de nuestras colecciones biológicas, sino de los mapas y datos espaciales del Instituto de Geografía como información mareográfica, sísmica, volcánica y de ecosistemas que generan los institutos de Geofísica, Geología, Ciencias del Mar y Limnología, y el Centro de Ciencias de la Atmósfera”, señaló.

En el Megaproyecto SIBA participan varias dependencias del Susbsistema de la Investigación Científica de la UNAM, para sumar a la ciberestructura la enorme riqueza de datos de diversidad que existen en esta casa de estudios, concluyó.