BBC/Mundo
Oaxaca, México.- En el Festival de Woodstock de 1969, ante casi medio millón de jóvenes, actuaron 32 de los mejores solistas y grupos de rock de aquel momento. 40 años después, la actuación de la banda de Carlos Santana se sigue recordando como uno de los grandes momentos del festival.
Gregg Rolie fue uno de los componentes más destacados de aquella banda. Organista y cantante, Rolie es la voz de algunos de los grandes éxitos Carlos Santana, como "Black Magic Woman", "Evil ways" o la composición de Tito Puente "Oye cómo va".
Tras cuatro álbumes en conjunto, ambos músicos se separaron y a partir de ese momento Rolie formó la también legendaria banda californiana Journey junto con el guitarrista Neal Schon.
Después de su separación, sin embargo, Rolie y Santana siguieron colaborando puntualmente y en 1998 ingresaron en el Salón de la Fama del "Rock and Roll" junto con los demás integrantes de la banda original de Santana.
Para muchos, sin las brillantes notas del órgano de Rolie, la particular fusión musical que hizo famosos los primeros discos del guitarrista mexicano hubiera sido muy diferente.
"Fue una época maravillosa. Creamos algo que nadie podía imaginar. Se trataba más de ritmos y solos que de canciones convencionales. No era música latina, ni rock, ni blues, nada de eso. Era la combinación de todo ello", recuerda Rolie.
Un sonido nuevo que encontró en la actuación de la banda de Santana en Woodstock, en 1969, su lugar de presentación ante el mundo.