UAM/Ciencias Políticas
Oaxaca, México.- La posibilidad de integrar un frente de izquierda en México es una oportunidad que no debe desaprovecharse y que tiene entre sus objetivos construir un nuevo régimen republicano, cambiar el modelo económico, reformar el sistema de partidos y establecer un nuevo pacto social en el que participen las organizaciones sociales y los ciudadanos.
[caption id="attachment_28586" align="alignleft" width="160" caption="Alianza posible de izquierda"][/caption]
Para el maestro Manuel Larrosa Haro, profesor-investigador del Departamento de Sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), esta iniciativa impulsada por sectores de la izquierda es propicia, en virtud de que el proyecto llamado “de la alternancia” está derrotado por la incapacidad de los gobiernos de la derecha para resolver los problemas que aquejan a la nación.
La medida de conformar este bloque de organizaciones de izquierda propone un proceso de cohesión nacional y demanda la aplicación de políticas públicas para resolver el rezago social y solucionar el tema de la inseguridad con acciones distintas a las que aplica la actual gestión.
El especialista de la Unidad Iztapalapa resaltó que existe una agenda clara de los convocantes sobre esta propuesta, quienes señalan la necesidad de recuperar la soberanía nacional y que el movimiento sea coordinado por la sociedad, sin protagonismos por parte de algún partido.
El también coordinador de la Licenciatura en Ciencia Política comentó que es deseable que se permita a la izquierda mexicana concretar una propuesta de país con políticas distintas a las de la actualidad, ya que ha desarrollado otra forma de gobernar.
Propuso que para alcanzar los propósitos de este bloque debe haber un compromiso social de los participantes, sería importante que los integrantes de la corriente Nueva Izquierda que lidera el actual presidente del Partido de la Revolución Democrática, Jesús Ortega Martínez, hagan una relectura de las posturas, pues sus ideas aislacionistas son una traba ante la magnitud del cambio social que requiere el país.
Consideró que sería un error que Nueva Izquierda no participara en esta convocatoria frentista, ello sería resultado de una lectura equivocada.
En el pasado, apuntó, se dieron dos intentos de integrar a la izquierda mexicana en una sola organización; el primero encabezado por el extinto Partido Socialista Unificado de México (PSUM), sólo que en aquella ocasión muchas organizaciones quedaron al margen del proyecto.
La otra tentativa estuvo a cargo del Frente Democrático Nacional (FDN), que surgió en el contexto de la elección presidencial para apuntalar la candidatura presidencial de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano. En aquellos años, los convocantes fueron la corriente democrática escindida del Partido Revolucionario Institucional, así como el Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional.