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Oaxaca, México.- A fin de mitigar un posible impacto destructivo sobre los bienes culturales en los estados de las penínsulas de Yucatán y California, el Golfo de México y la costa del Pacífico, por la próxima temporada de huracanes, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) puso en marcha el programa (Previnah).

 

 

Los sitios arqueológicos, museos y monumentos históricos del INAH que adoptarán las medidas del programa de Prevención de Desastres en Materia de Patrimonio Cultural (Previnah), son: Quintana Roo, Campeche, Yucatán, Baja California, Baja California Sur, Nayarit, Veracruz, Tabasco, Chiapas, Tamaulipas, Oaxaca y Guerrero.

 

 

Dicha medidas fueron adoptadas de acuerdo con la información de la Comisión Nacional del Agua, cuyos pronósticos para la temporada de ciclones 2009, establecen que habrá 11 tormentas tropicales, ocho huracanes moderados y seis intensos, para ambas costas del país.

 

 

Las acciones preventivas incluyen la realización de inspecciones y dictámenes en zonas arqueológicas, museos y monumentos históricos, en los que además se hace levantamiento del registro fotográfico que muestra las condiciones de los bienes culturales, entre otras.

 

 

Por ello, el INAH ha establecido lineamientos generales que se han de adoptar en todos los recintos susceptibles a enfrentar estos fenómenos meteorológicos, y que deben estar alerta al desarrollo de los mismos, además de comprobar el estado y disposición de herramientas y equipo para contingencias.

 

 

En las zonas arqueológicas se asegura la existencia de guardarayas (caminos) de por lo menos dos metros que faciliten la circulación, a fin de contar con accesos alternos.

 

 

Se instalan redes de pescar y sogas sobre palapas que protegen estructuras prehispánicas, además de dar mantenimiento a los drenajes naturales y hacer podas del ramaje de árboles, que con su caída podrían amenazar la integridad de los vestigios.

 

 

En el caso de los museos, se define un área temporal para el almacenamiento de obras y colecciones, el aseguramiento de vitrinas y estantería en el piso y a muros y techos. Sólo en caso de peligro se habrán de embalar las colecciones y anotar el número de caja y su contenido.

 

 

De igual manera, en los monumentos históricos se realizan limpias periódicas y retiro de basura para evitar la acumulación de agua, y detectar y en su caso reparar las fisuras y grietas para evitar filtraciones. También se hace el aplanado de elementos constructivos como fachadas y muros para reducir los riesgos de desmoronamiento.

 

 

Así como el retiro de hierba de muros y pretiles adyacentes para evitar la humedad, y el monitoreo permanente del estado de conservación que guardan las edificaciones.

 

 

Cabe mencionar que el INAH periódicamente desarrolla programas de capacitación que incluyen temas como evacuación de personas, aseguramiento de recintos y sitios arqueológicos, así como manejo de sustancias tóxicas.

 

 

Además del establecimiento de acuerdos con autoridades locales para la ejecución de las tareas de prevención y en su caso la atención de los monumentos afectados tras el paso de huracanes.

 

 

El programa Previnah implementado por el INAH desde 2002, está validado por el Centro Nacional de Prevención de Desastres y cuenta con reconocimiento internacional por su enfoque en la salvaguarda del patrimonio cultural.