INAH rehabilita ex conventos de la región mixteca

De la REDACCIÓN

Oaxaca, México.- Los ex conventos dominicos de Santo Domingo Yanhuitlán, San Pedro y San Pablo Teposcolula, y San Juan Bautista Coixtlahuaca son restaurados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), luego de los daños registrados por el sismo de 1999, y para los que se destina una inversión de 28 millones de pesos.

Ellos son muestras de la arquitectura religiosa generada en los siglos XVI y XVII en la región de la Mixteca Alta, Oaxaca.

[caption id="attachment_22443" align="alignleft" width="258" caption="Exconvento de Coixtlahuaca"][/caption]

Los trabajos de rehabilitación arquitectónica en los tres conjuntos conventuales, separados entre sí por poco menos de 80 kilómetros (se ubican a medio camino entre Tehuacán, Puebla, y la capital oaxaqueña), constituyen uno de los proyectos prioritarios para el INAH que este 2009 tendrán avances considerables.

 

 

 

 

A esta iniciativa de rescate -emprendida en 2006- se ha sumado la colaboración de diversas instituciones, como Fomento Social Banamex, Fomento Cultural Banamex, la Fundación Alfredo Harp Helú y el Instituto de Conservación Getty, así como las propias comunidades.

El 30 de septiembre de 1999 quedó en la memoria de muchos oaxaqueños como una fecha fatal, pues un sismo de 7.4 en la escala Richter dañó gravemente parte de su patrimonio edificado, como fue el caso de los ex conventos de la Ruta de la Mixteca Alta.

A casi diez años de la atención oportuna, se ha logrado la consolidación de varias de las estructuras que fueron dañadas por el movimiento telúrico, de tal suerte que ya no representan un riesgo para visitantes y feligreses.

[caption id="attachment_22444" align="alignleft" width="258" caption="Juan Urquiaga responsable de los proyectos de conservación"][/caption]

El arquitecto Juan Urquiaga Blanco, reconocido por la rehabilitación del ex convento de Santo Domingo de Guzmán, en la ciudad de Oaxaca, es el responsable de las labores en los símiles de la Mixteca Alta.

 

 

 

 

"En Yanhuitlán, la restauración integral de la iglesia y el claustro principal concluirá el próximo año; mientras, en Teposcolula, las labores se han enfocado en la bóveda central de la capilla", dijo Urquiaga.

Uno de los casos ejemplares ha sido la intervención del ex convento de San Juan Bautista Coixtlahuaca, que data de 1546, donde la afectación del ábside y el campanario del templo, ha sido resuelta con el apoyo de los arquitectos Sergio Calderón, Carlos Gris, Alfredo Sánchez y Jesús Sámano, así como de 80 trabajadores de la zona.

Urquiaga detalló que la restauración del campanario avanzará más de un 60 por ciento en el presente año, de tal manera que se llegará hasta la zona de los capiteles y en 2010 se proseguirá hasta la terminación de las obras.

El especialista del INAH comentó que ante el riesgo de colapso de la torre se determinó desmontarla, piedra por piedra. Esto mediante una evaluación interdisciplinaria y en colaboración con el despacho de ingeniería estructural Colinas de Buen.

[caption id="attachment_22445" align="alignleft" width="300" caption="La reconstrucción en el ex convento de San Juna Bautista Coixtlahuaca"][/caption]

La intervención del campanario, que data del siglo XVIII, implica su reconstrucción con tecnología de punta, mediante un sistema a base de neopropeno (goma sintética incombustible y de alta resistencia) que facilita la oscilación en caso de sismo, y evita agrietamientos en la torre.

 

 

 

 

Al desmontar el campanario se enumeraron los sillares menos dañados para su posterior reutilización, y también se ocupó cantera nueva de mayor resistencia que sirve para reforzar el armazón interno de concreto.

La inversión en la torre del ex convento de San Juan Bautista Coixtlahuaca, también responde a su función social. Se trata de un instrumento de gran importancia para los pobladores, quienes extrañan el repique. Además, durante la intervención se generaron empleos, al contratar mano de obra del lugar.

Sin embargo, una de las obras más vistosas y que ha tenido una perspectiva interdisciplinaria, ha sido el retablo. El restablecimiento de este bien inmueble por destino, de 16 metros de altura y que también se vio afectado por el sismo de 1999, finalizará este año.

Luego de instalar una estructura compuesta por dos grandes postes (de alrededor de 14 metros de altura) con travesaños de pino, se fijará el retablo que previamente desmontó un equipo de restauradores del INAH. El armazón de madera permitirá que esta monumental obra pueda oscilar en caso de sismo.

Anterior a estas labores se restauró el área del ábside donde se encuentra el retablo, lo que implicó también la atención de la bóveda.

Los trabajos en el ex convento de San Juan Bautista Coixtlahuaca, que ya suman ocho temporadas, han abarcado además la reintegración de la bóveda de arista en el deambulatorio del ala poniente del claustro alto.

También, se restituyó la bóveda del cubo de la escalera y fueron consolidadas zonas críticas en el arco de la capilla abierta.