Por Salvador José
Oaxaca, México.- Unos conocidos antro-prólogos me alertaron sobre el peligro que corren muchos de las zonas arqueológicas en nuestro país, pasando por su peor etapa de destrucción, el neoliberalismo tardío, al ser administrados por los Dráculas del INAH, que con pésima imitación hollywodense, los émulos del conde de Transilvania, quieren sacarle el mayor jugo hemoglobínico posible, a las todavía esplendorosas pirámides del Sol y la Luna.
[caption id="attachment_6661" align="aligncenter" width="300" caption="Los monumentos historicos del país en riesgo por acciones privatizadoras"]
El show de luz y sonido conocido en las marquesinas neoliberales como “Resplandor Teotihuacano”, ha hecho más ruido que sonidos de caracoles sacando a la luz pública, la obsesiva ambición del destroyer gobernator Enrique Peña Nieto, con el fin de llegar al
Virreinato,- ¡excusez-moi!- presidencia.
El propósito, es impulsar un proyecto turístico, que a según su comendadora Beatriz Pagés, miembro de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados federal, “generaría una derrama económica para una de las zonas más marginadas…….“, “ya que el país no está para detener proyectos económicos” ; Lo que es evidente que las empresas transnacionales de comida chatarra se quieren apoderarse de un suculento corredor turístico, para realizar su tianguis capitalista conocidos dentro de la burocracia oficial como proyectos económicos. Que sin ningún control y con el aval de la administración estatal y del Instituto Nacional de Antropología e Historia alias INAH, están siendo favorecidas, señaló el legislador José Alfonso Suárez.
Evidente también resulta el favoritismo de la empresa televisa: cuando por un lado, reprueban el vandalismo provocado en Tabasco, donde, como los informados lectores saben, unos mozalbetes arrojaron líquidos y otros líquidos dañinos en contra de las colosales cabezas olmecas, posiblemente bajo el influjo de alguna substancia peyotesca.
Lo que salta de la pantalla, es el tratamiento mediático que se da a cada uno de los casos, quizá porque el gobernador mexiquense es cliente asiduo de la televisora, y los Pollocks chichimecas no.
En las mismas circunstancias se dio el ominoso caso de expulsar –en el mismo vestigio mexica-a unos concheros mandándolos a vestir como se debe, además de que el “sonido de sus caracoles dañaba los monumentos y molestaba a los turistas” ¡¿WHaaT?!(1)
Para aquellos, todo el peso de la ley mediática y burocrática de los antropófagos del INAH; para el destructivo “copete aerodinámico” Peña Nieto, mutis total en los insufribles noticiero televisos.
Asimismo, el Cabildo de Oaxaca, legaloidemente (Reglamento para la Prevención y Control de la Contaminación Visual y al Reglamento de Espectáculos y Diversiones (¿¿¿¿¿?????) y otras ordenanzas) aprobó por unanimidad sancionar con 100 salarios mínimos o 36 horas de arresto a los grafiteros que se les caiga “in fraganti” o ¿in grafitin?; y de paso asaltar, perdón, multar a todos aquell@s que tenga anuncios publicitarios. Mi cochambrosa imaginación me dice que también pasarán a la bascula la atiborrada publicidad de empresas transnacionales como: Coca-Cola, Texaco, Mc Donalds, Ford and-others companies-¿O n o mis queridos y honorables ayuntados concejal@s?....ya veremos. …..¿O a caso tales medidas tendrán algún fin campañesco? ….¿¡Qué fraguas Fraguas!?
Sin embargo, lo que sí es un verdadero espectáculo, son los trompetazos y las divertidas carreras en pleno Centro Histórico, ya no digamos la contaminación visual que provocan las chatarras andantes, conocidas en el bajo mundo como transporte urbano, que con su publicidad pegada hasta en sus cochambrosas placas, gozando por parte de las autoridades de tránsito estatal y municipal de com-ple-ta impunidad. Cuestión aparte es la exhalación de gases mortíferos. ¿Sera que los adefesios mecánicos, se convertirán de repente en bellos y eficientes carruajes del acarreo sufragista?
Así están las apreciaciones culturales, espectáculos, diversiones, sonidos y otras luces brillantes que tienen nuestros políticos neoliberales.
Así que prepare sus ahorritos, cinco salarios mínimos, si quiere visitar –con la sacrosanta familia clase mediera-nuestros centros arqueológicos y otros tantos más si quiere ver los famosos shows disneylescos de luz y sonido.
Mientras , en nuestro multiusos Santo Domingo, enclaustrados los teóricos de la antropología, todavía no se ponen de acuerdo si el Patrimonio cultural intangible debe llamarse así o inmaterial, a esas alturas los va a rebasar el sobrecalentamiento global, sin que se den por enterad@s.
Una opción lógica, sería unirse al paro nacional que se viene en próximos días en diferentes centros arqueológicos del país, por los trabajadores sindicalizados del INAH y de tod@s aquell@s mexican@ que se sientan agraviad@s por tan notorios daños a nuestro patrimonio cultural tangible o material, como usted quiera llamarle. Esto es todo.
1)”La Jornada” 26del 2009
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