Vidal Pineda VÁSQUEZ
Oaxaca. México. “A una sociedad sin memoria le espera algo muy grave” menciona el escritor Gonzalo M. Tavares (Luanda, Angola, 1970), quien presentó en esta ciudad su libro “Jerusalén” (Almadía, 2009), en el cual, a través de sus textos recrea un mundo en el que la sociedad se desenvuelve en escenas oscuras de la vida humana y la memoria se convierte en el principal elemento de sobrevivencia.
En entrevista con el joven escritor, señaló que las personas que no tienen memoria y olvidan lo vivido en otros tiempos, se dirigen hacia fenómenos graves que pueden afectar muchos. Como ejemplo citó el problema de crisis mundial y desempleo que se vive en toda las naciones y, haciendo una analogía con los años y las dificultades que dieron origen a la Primera Guerra Mundial, Tavares mencionó: “la crisis y el desempleo es algo muy representativo para las relaciones humanas. Esta crisis económica es el inicio de algo muy terrible, por eso pienso que la memoria es algo muy importante”.
[caption id="attachment_44021" align="alignleft" width="210" caption="El escritor Gonzalo M. Tavares, presentó en el DF su libro “Jerusalén” de editorial Almadía."]
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Tavares, a quién el reconocido escritor José Saramago le ha demostrado su admiración debido a la grandeza de sus escritor, logra en “Jerusalén” un mundo en el que 4 personas se vuelven protagonistas y comunicantes de sentimientos oscuros, de rarezas que nos permiten conocer y reafirmar que existe el lado amargo de la vida. Nos reafirma que así como todo puede ser alegre, existen tiempos de amargura y desesperanza.
Las historias que en el libro se esconden mantienen una estrecha relación con la fe, la religión, la locura, la carencia human y la decrepitud de las sociedades. Discursos que obligan a la reflexión humana se pueden palpar en cada capítulo.
A decir de Tavares, la memoria juega un papel muy importante en la narración pues, los protagonistas invitan al lector a un reencuentro emocional. “El olvido no sólo es el reflejo de una falla intelectual, sino también política ya que el olvidar significa no tener presente algo que ya ha pasado y, lo cual, repetiremos”.
Dedicado a observar a las personas, Tavares ha logrado conjuntar emociones en “Jerusalén”, para él, este libro representa el otro lado de su ser creativo, caracterizada, en otras novelas, como algo lúdico. Sin embargo; este libro y “Agua, perro, caballo, cabeza”, también editado por Almadía, reflejan la oscuridad de su imaginación, pues piensa y ha comprobado que el ser humano tiene esta dos facetas, conoce lo bueno y lo malo. “dolencia y violencia”, afirma.
El desgaste de las palabras
Como escritor – señala – siempre eme ha interesado saber cómo las palabras resisten al tiempo, eso me sorprende mucho y más aún las palabras religiosas. El lenguaje tiene un desgaste natural que no alcanza las palabras religiosas.
Lo anterior lo mencionó tras hablar sobre “Aprender a rezar en la era de lo técnico” libro que prepara y en el habla del cómo, a pesar del paso de los siglos, la existencia de los rezos religiosos son los mismos y siguen teniendo la misma fuerza con las que aparecieron.
“La forma de rezar es la misma, lo único que ha cambiado son los escenarios, antes todo era relacionado fuertemente con la naturaleza, ahora no, todo nos resulta tan material”. Comenta.
Cabe señalar que “Jerusalén” de Gonzalo M. Tavares, fue presentado en el marco de la XXXI Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.