Fortino TORRENTERA O.
Oaxaca. México. Al exigir al estado mexicano que informe sobre los 17 indígenas loxichas presos hace 14 años, Juan Sosa Maldonado, de la Organización de Pueblos Indígenas Zapotecos, dijo que en esa región se vive una situación de excepción.
Acompañado de integrantes de la Defensoría Popular que encabeza Israel Ochoa Lara, convocaron a la solidaridad de la sociedad civil para exigir la libertad de esos presos, “pues los Loxichas pareciera que no existen y sólo esperan para su libertad una resolución que han retrasado las autoridades”.
“Nos parece que en las comunidades indígenas, llámese, Copala o cualquiera otra de la Sierra Sur, llámese Loxichas, se vive una situación de excepción que nosotros la conocemos desde que iniciaron las incursiones militares”, comentó.
[caption id="attachment_61457" align="alignleft" width="300" caption="Llaman a solidarizarse con indígenas Loxichas, presos hace 14 años."]
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Dijo que desde 1996 la operación de grupos paramilitares es cotidiana, en franca violación a los derechos humanos, no sólo se ocultan las más de 100 ejecuciones extrajudiciales que antes se atribuían a enfrentamientos con el EPR, sino que incluso el Ministerio Público ya no da fe de las denuncias y hechos violentos.
Lo inaudito, señalaron es que “los actores políticos responsables de esas violaciones aún estén ejerciendo cargos públicos, lo que no ayuda en nada a la reintegración y a la vida comunitaria, de quienes vivimos la represión y fuimos encarcelados, de los huérfanos y viudas”.
A diferencia de Copala o incluso Chiapas, fue una región en la que no se permitió que hubiera esta proyección mediática para que se hubiera conocido como en otros casos, aclaró
Ejemplo de ello es que son los indígenas Loxichas, los presos políticos con más tiempo en las cárceles del país, que a diferencia de Atenco u otros detenidos, ni siquiera existen en los medios de comunicación nacional.
Resulta demagógico que México de una cara ante el mundo de defensor de los derechos humanos en Cuba, con los migrantes, etcétera, pero que adentro de su casa violente todas las leyes nacionales y tratados internacionales, apuntó Sosa Maldonado.
También dijeron que solicitarán una ley de amnistía, pues existe unas 80 órdenes de aprehensión pendientes de ejecutar por parte del gobierno federal
Este miércoles, Sosa Maldonado y otros ex presos del caso Loxicha ratificarán sus testimonios en espera de que se agilice la conclusión de esta investigación, de lo contrario pedirán medidas cautelares y expondrán el caso en foros internacionales.
Esta acción la emprenden teniendo como antecedente que el 17 de Junio del presente año, el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, ONU, promulgó el 24 de marzo como "Día Internacional por el Derecho a la Verdad acerca de las Graves Violaciones de los Derechos Humanos y la Dignidad de las Víctimas" en honor a Monseñor Oscar Arnulfo Romero.
Mediante un desplegado, manifiestan: que cuando las esperanzas de libertad para los presos de Ateneo brillan con más fuerza, es imprescindible ratificar nuestra incondicional solidaridad y exponer que, a 37 meses de la desaparición forzada de los luchadores sociales Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez.
A casi 14 años de !a detención ilegal y encarcelamiento despótico de los indígenas loxicha que aún permanecen en prisión, las esperanzas de libertad para los Presos Políticos y de Conciencia de la Región Loxicha. también son alimentadas por estos acontecimientos
Lamentamos que el Estado Mexicano, lejos de contribuir en el entorno latinoamericano al fortalecimiento de los derechos humanos. obstaculiza e! derecho de las victimas a conocer la verdad y alcanzar asomos mínimos de justicia: ya que la Procuduría General de la República lejos de cumplir con su responsabilidad en cuanto a la denuncia interpuesta en octubre de 2002 contra Diódoro Carrasco: y sus secuaces por los delitos de Lesa humanidad cometidos contra indígenas de la Región Loxicha. exhibe mecanismos dilatorios para perpetrar la impunidad que ha sido extendida a estos mercenarios de la política por las violaciones a derechos humanos contra los indígenas zapotecos que han sido ampliamente documentadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Los partidarios de Gabino Cué nos acusarían de interferir en sus sueños de cambios verdaderos pero, como siendo indiferente ame la tragedia que viven minuto a minuto quienes aún permanecen en las garras de la prisión, quienes han quedado huérfanos, han abandonado sus terruños o sufren las secuelas de la desaparición forzada, la cárcel y la tortura.
Cómo abrir un compás de espera para no tocar con el pétalo de una mención a los responsables de este pasado tan atroz que sigue tan vivo y amenaza con profundizarse con sus aspiraciones del retorno al poder. Sin impunidad, otra Loxicha es posible.