*La sociedad debe participar en la toma de decisiones, para que no sea figura decorativa, expone
*Ofrece conferencia magistral sobre la Alternancia en los Diálogos por la transición
Oaxaca, México.- El gobernador electo Gabino Cué sí puede hacer la diferencia en el país, contribuyendo a la instauración de la democracia en Oaxaca, afirmó Elio Villaseñor Gómez, Director de Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del Diálogo, A.C, y subrayó: “Le doy mi confianza, porque tiene capacidad para ello.”
Así lo expresó al participar aquí en un hotel ubicado en el cerro del Fortín con su ponencia: La Alternancia: la oportunidad de cambiar las reglas de poder, en el marco del ciclo de conferencias denominado “Oaxaca: Diálogos por la transición”, que organizan el Consejo Ciudadano de Vigilancia para la Transición Gubernamental, el Instituto de Investigaciones Sociológicas de la UABJO y el Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS).
En este marco, el sociólogo agregó que Oaxaca puede ser el laboratorio de cambio en el país; pues “lo que no ha pasado en México, puede ocurrir en este estado”, y explicó que no se trata de un laboratorio de ensayo y error, sino como la gran posibilidad de recuperar prácticas sociales positivas que beneficien a la colectividad.
Planteó que la certidumbre de un proyecto claro de gobierno, la participación ciudadana y la ética pública, son principios básicos para la construcción del cambio en esta entidad.
Para Elio Villaseñor, ex Consejero para la Transparencia de Programas Sociales Federales del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), es importante desmitificar los conceptos de alternancia y transición para arribar a la instauración de la democracia.
Sostuvo que la alternancia que vivimos los mexicanos en el año 2000,” no ha significado nada para la sociedad, persiste la actitud del gobierno de ver a la ciudadanía como sujetos de segunda clase, no susceptibles de reclamar derechos”.
Y agregó: “Un efecto de la alternancia es la generación de virreyes en los estados y la creación de otra nobleza en los municipios y sindicatos nacionales.”
El también ex Consejero Ciudadano del Instituto Mexicano de la Radio fue más allá al señalar que “la alternancia se volvió un reparto del poder, un cambio de colores para hacer lo mismo que hacía el PRI”.
Presentó entonces una de las tesis centrales de su ponencia al plantear que la cultura priista es un cáncer que ha permeado a la sociedad mexicana, lo mismo que a los partidos políticos, sin distinción alguna.
Ante un público atento que colmó el sitio de la conferencia, Elio Villaseñor ejemplificó que la cultura priista ha dejado como consecuencia que los gobernantes se sientan dueños del recurso público.
Al insistir que la sociedad no está exenta de esa cultura, recordó la sentencia del “a mí no me des, ponme donde hay”, y los ciudadanos no han sabido oponerse a esta regla, indicó.
Villaseñor afirmó que “esta cultura priista es la basura que los ciudadanos ya no quieren, por eso en Oaxaca el cuatro de julio los ciudadanos dijeron ya basta!”
Luego de proponer que el nuevo gobierno realice un ejercicio de autocrítica, para darse cuenta de estos fenómenos, “pues de lo contrario la inercia puede acabar con la esperanza ciudadana”, el ex catedrático de la Universidad Iberoamericana adelantó tres principios sobre los cuales puede asentarse el cambio en Oaxaca:
Ofrecer a la ciudadanía la certidumbre de un proyecto claro; propiciar la participación de la sociedad en la toma de decisiones, para que ésta no sea simple figura decorativa y pueda también implementar políticas públicas.
En este segundo punto destacó que en Oaxaca, los saberes colectivos representan un capital para el cambio, sin embargo hasta ahora es un capital social desaprovechado.
El ponente fue más allá al señalar que “tenemos que romper con el concepto de gobernabilidad, que refuerza una relación vertical, y pasar a la gobernanza”.
¡Democraticemos la toma de decisiones! Propuso con el tono fuerte que le caracterizó a lo largo de su participación.
Finalmente, quien fuera titular de la Delegación Iztapalapa, en el Distrito Federal, expuso que la confianza para reconstruir el tejido social y la tolerancia, son valores de una ética pública necesaria para el cambio.
Al concluir la conferencia, el Coordinador del Consejo Ciudadano de Vigilancia para la Transición Gubernamental, Francisco Álvarez Figueroa, entregó al ponente un reconocimiento en nombre de los organizadores, en presencia de María Eugenia Mata, también integrante del Consejo Ciudadano, quien fungió como moderadora del acto.
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