Agencias   Oaxaca, México.-La Policía Federal Preventiva (PFP), desalojó hoy a los mineros que ocupaban desde julio de 2007 la histórica mina Cananea, en el estado Sonora. [caption id="attachment_57949" align="alignleft" width="300" caption="La histórica mina de Cananaea devuel por el gobierno federal a la transnacional Grupo México"][/caption] El conflicto legalmente está planteado por los trabajadores por una violación del contrato de trabajo por parte de la empresa propietaria. Sin embargo, se cree que realmente fue iniciado para defender al dirigente sindical Napoleón Gómez Urrutia, enfrentado con el gobierno por la expolosión de la mina Pasta de Conchos en 2006, donde muerieron 65 trabajadores, aseguró DPA. Gómez Urrutia, quien tras haber sido acusado por el gobierno de una serie de delitos se refugió en Canadá, es el máximo lider del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana. La desocupación, según un comunicado emitido por la Secretaría de Gobernación, "comenzó con el ingreso pacífico -y sin resistencia ni incidentes- de elementos federales a las instalaciones de la mina" durante la madrugada de hoy. El sindicato ha señalado tras el desalojo que la medida fue ilegal y que viola los convenios internacionales que tiene México con la Organización Internacional del Trabajo. La mina de Cananea es histórica porque una huelga que comenzó en ese centro laboral en 1906 supuso el inicio de la Revolución Mexicana de 1910, según algunos historiadores.   El 19 de febero de 2006 una explosión en la mina Pasta de Conchos, ubicada en Coahuila, norte, dejó como saldo 65 obreros muertos.   La huelga quedó sin efecto cuando un tribunal resolvió en febrero pasado que las relaciones contractuales entre los trabajadores y Grupo México habían concluido. Con ello, la parte patronal quedó autorizada a recobrar el control de la mina.   Tanto Cananea como Pasta de Conchos son propiedad de Grupo México, que tiene minas también en Perú. El 19 de febero de 2006 una explosión en la mina Pasta de Conchos, ubicada en Coahuila, norte, dejó como saldo 65 obreros muertos.   La huelga quedó sin efecto cuando un tribunal resolvió en febrero pasado que las relaciones contractuales entre los trabajadores y Grupo México habían concluido. Con ello, la parte patronal quedó autorizada a recobrar el control de la mina.   Tanto Cananea como Pasta de Conchos son propiedad de Grupo México, que tiene minas también en Perú.