Carolina QUEZADA Oaxaca, México.-  Gracias al voto ciudadano diferenciado, emitido el 4 de julio, el dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), Flavio Sosa Villavicencio no podrá acceder a una curul en la próxima legislatura local, pero también le quita el financiamiento al Partido del Trabajo  que lo postuló. [caption id="attachment_56341" align="alignleft" width="300" caption="Ejemplar castigo ciudadano"][/caption] Lo anterior se desprende de los datos aportados por el Programa de Resultados Preliminares (PREP), en los que  el PT ha obtenido hasta ahora, una votación global  de apenas el 1.3, que unas horas de cerrarse el conteo legal, podría dejar  a Sosa Villavicencio de la diputación por la vía plurinominal.   La ciudadanía cobra así la afrenta al Partido del Trabajo por postular al que considera el enemigo público número uno de la paz social en Oaxaca y por eso además, de no alcanzar una votación de 1.5 por ciento, ese instituto político pierde el financiamiento estatal. Este escaso porcentaje de votos que parece irreversible, es también producto de la postulación de Lenin López Nelio  a la presidencia municipal de Juchitán, en donde el PT apenas obtuvo 4 mil 87 sufragios a pesar de ir en coalición con el PRD y el PAN. Una lección más de la ciudadanía contra los partidos que no la escuchan y se guían por la voracidad política para postular personajes de gran desprestigio social.