Carolina QUEZADA   Oaxaca. México. Integrantes de la organización “Ecoturismo Comunal El Chapulin”, denunciaron que el pasado domingo en que se realizaría el 2º. Festival por el árbol y la vida en la presa del mismo nombre en Santa Cruz Xoxocotlán, fue impedido de manera violenta por un grupo de fraccionadores, trabajadores del INAH.   Señalaron que hay gran indignación, pues dicho festival que busca la reforestación de la presa el Chapulín, tuvo que ser suspendido, porque un grupo de fraccionadores, encabezados por empleados del Instituto Neocolonial de Antropología e Historia, cerraron el paso con cables de acero y con amenazas de muerte a los organizadores, y detallan:     [caption id="attachment_59414" align="alignleft" width="300" caption="Trasnacionales buscan privatizar la zona, denunciaron."][/caption] Como hemos hechos de su conocimiento, los propósitos de la “Campaña de reforestación para que haya agua 2010”, es el de evitar que el área silvestre aledaña a las faldas de Monte Albán continúen erosionándose, lo que ha traído como consecuencia que los niveles de agua de los pozos cada año bajen con mayor rapidez.   Esta situación ha provocado que el agua domiciliaria cada vez se racione, haciendo que el suministros en la cabecera sea cada tercer día y en algunas colonias les llegue agua una o dos veces a la semana, llegando a situaciones que en la mayoría de los asentamientos irregulares, las familias tengan que abastecerse de agua de pipas.   Observamos que esta absurda acción en contra de la reforestación está dirigida por la directora de Monta Albán, Nelly Robles García, quien en ocasiones anteriores ha amenazado por medio de oficios, a las autoridades escolares que han participado en la reforestación, con demandarlos ante la PGR si continúan realizando estas tareas.   Entendemos que los intereses de las trasnacionales que han puesto sus miras en Monte Albán, para construir hoteles de 5 estrellas, campos de golf y grandes centros comerciales, dentro de la poligonal de protección, son los que mueven a esta funcionaria pública a ordenar a sus empleados a realizar estos actos criminales.   Estos intereses mezquinos, ponen en situación de riesgo a una población de más de 80 mil habitantes, asentados en este municipio conurbado a la ciudad de Oaxaca, al cancelar la posibilidad de continuar reforestando el área de captación natural de agua de lluvias, lo que consideramos como un atentado a los derechos humanos colectivos e individuales de esta comunidad que le da vida al gran centro comercial en que se ha convertido la ciudad capital del estado.   Por ello manifestamos públicamente nuestra indignación y repudio a la política del INAH de alentar y proteger los intereses del gran capital extranjero, al entregarles el patrimonio cultural heredado de las culturas primigenias de Mesoamérica, haciendo uso de los propios habitantes del pueblo, envilecidos por el dinero y las migajas que recogen de la mesa de sus nuevos amos.   Les queremos decir que continuaremos con los trabajos de reforestación en las que nos han acompañado grupos de alumnos y sus maestros, comuneros y vecinos, así como organismos civiles y familias que manifiestan su preocupación por el deterioro del medio ambiente.   Hacemos responsables a Nelly Robles García y a sus lacayos, así como al Jorge Franco Vargas quien está detrás del Comisariado de Bienes Comunales, impuesto por Silvano Reyes y Erasmo Angel, este último trabajador del INAH en Monte Albán, de cualquier agresión o atentado en contra de los miembros de nuestra Asociación de Ecoturismo Comunal el Chapulín A.C. o de quienes participan en actividades de reforestación.   Por último invitamos a la dirigencia de la Sección XXII del sindicato de trabajadores de la educación, a la cual pertenecen los trabajadores del INAH a que se les investigue a estos empleados, por participar en el proceso de privatización de Monte Albán.