Lilia TORRENTERA G. Oaxaca, México.- No podrá haber una transición en Oaxaca sino existe un cambio en la forma de  gobernar y con instituciones renovadas, advirtió aquí, el ex gobernador,  Diódoro Carrasco Altamirano. El político oaxaqueño,  participó en la presentación el libro Oaxaca 2010 Voces de la Transición  acompañado de los investigadores Isidoro Yescas Martínez y Porfirio Santibáñez asi como del editor, Claudio Sánchez Islas y la periodista, Guadalupe Thomas. En su intervención, el ex mandatario, quien confesó no haber leído el libro en su totalidad,  ponderó  sin embargo,  la oportunidad de la salida a la luz pública  de esta obra  en el que participan 37 autores, por su ejercicio saludable y necesario a quince días de un nuevo gobierno en Oaxaca. Precisó que en esta obra la cantidad de información desde  diferentes perspectivas para el análisis en muchos temas manifiesta también, la necesidad de 37 mujeres y hombres por expresar sus puntos de vista. La primera reflexión, hecha por Carrasco Altamirano fue  que la sociedad oaxaqueña logró por la vía pacífica, legal y por las instituciones hacia la  alternancia del poder ejecutivo del estado “Oaxaca pasó la prueba del ácido de la democracia men un proceso electoral del 2010 y en un contexto de próximas elecciones en 2011 y 2012 y en medio de la imperfección de las instituciones que coordinan estos procesos”, indicó En segundo lugar, expuso   aún con todos los factores locales, también existen factores nacionales,  que explican lo  que pasó en el proceso electoral en Oaxaca y que tiene su efecto por  los cambios  sufridos en México desde hace 25 años con gobiernos divididos o nuevos y una permanente alternancia. Refirió que como en el Congreso, en el país, ya no es fácil tomar decisiones y construir acuerdos porque no existen mayorías absolutas, porque cada partido tiene su espacio de poder  y difícilmente se pueden realizar cambios constitucionales o reformas importantes. Indicó que la coalición en Oaxaca, se explica  en el contexto de la reforma política electoral del 2007 para diferenciar de negociaciones bajo la mesa por  alianzas transparente en las que cada partido vale lo que sume en votos para construir con un candidato de coalición la presencia de los institutos políticos. Carrasco Altamirano,  dijo  sobre las transiciones,  que no todas son tersas, como sucedió en Oaxaca en el caso de la entrega-recepción con la antelación necesaria,  en comparación con la transición federal del 2000, cuando se entregaron  no solo los libros blancos de cada las dependencias sino las agendas de riesgo, estratégica  o de seguridad pública, para poner en antecedentes a los nuevos funcionarios con los elementos que permitieran transitar de manera ordenada sin afectar a la ciudadanía y  sin genera conflictos ficticios. Lo que DCA considera que llevó al triunfo a Gabino De ahí que la explicación de por qué gano Gabino Cué  en voz de quien lo formó políticamente,  lo haya obligado a  enumerar los cinco factores que lo llevaron al triunfo el 4 de julio del 2010. 1.-  Tuvo la capacidad de encabezar una aspiración  social de carne frente al hartazgo de la ciudadanía por todo lo que se explica en el libro de actitudes, comportamientos y resultados de los gobierno en turno. 2.- Porque se construyó una coalición a partir de un candidato., cuando en México es muy difícil competir  sin un candidato idóneo como sucede en el Estado de México 3.- Lograr una alianza de partidos ante un PRI que ha gobernado durante los últimos 60 años,  para  lograr sumar votos a favor del candidato con una plataforma mínima. 4.- La estrategia de campaña política-electoral que resultó más exitosa que la del contrario, por su organización, movilización, de discurso, manejo de medios e imagen y de vigilancia del proceso que da cuenta de que algo aprendieron de la elección de hace seis años, 5.-  El triunfo de Gabino Cué tampoco se puede explicar sin la presencia de las organizaciones sociales,  que fue una colación que fue más allá de los partidos políticos y que suma una multiplicidad de aportaciones  con movilización y entusiasmo y que sumó también con sus votos además de la participación de la ciudadanía que salió a votar con un porcentaje histórico que hizo la diferencia y explica los resultados porque no se intimido y salió a votar como sucede en las democracias. En Oaxaca, se comprobó que el PRI no es invisible Carrasco Altamirano también habló de los errores del PRI, el partido que lo llevó a gobernar Oaxaca de 1992 a 1998, al señalar que es importante no perder de vista los errores que llevaron al tricolor a perder en las elecciones  pasadas frente a una coalición opositora Así, señaló que primeramente el PRI perdió en Oaxaca porque tuvo enfrente a un mejor  adversario como sucedió en la elección del 2000 a nivel federal. Por ello, consideró que en Oaxaca, se rompieron  al menos cinco mitos con respecto al PRI: el de considerar que el tricolor era invencible de vencer; dos, que no se podía  con su estrategia electoral, con diferencia de recursos que hacía imposible cambiar un resultado  resultados; revertir la influencia de los medios de comunicación y el apoyo claro del precandidato a la Presidencia del PRI como Peña Nieto, iba a influir en el triunfo. “De ahí que estos mitos no se lograron en Oaxaca para convencer voluntades”, manifestó Los retos de la transición en Oaxaca Por último, Carrasco Altamirano,  detalló  que los retos de la transición,  entendida como un proceso para  construir nuevos escenarios para  formas distintas de hacer política, nuevas acciones para impulsar  programas y políticas públicas. Por ello, recordó que es necesario tomar como referente  lo sucedido en el sexenio de Vicente Fox,  quien llegó al poder no construyó ni instituciones, ni  formas ni políticas públicas alternativas al gobernar con los mismo métodos y las mismas instituciones a diferencia de Cué Monteagudo que anunció una reingeniería institucional. En ese sentido, explicó, que en Oaxaca, se están dando nuevas instituciones para nuevas realidades políticas “que me da mucho gusto esta decisión con una reforma política para modernizar una relación que están anclada en estructuras y equilibrios de poder que ya no existen”. De ahí que  señaló  que los alcances mismos de la alternancia que arranca en Oaxaca,  implica la posibilidad de  lograr escenarios distintos que no se van resolver de  la noche a la mañana, sino que se refiere ir al fondo de los problemas, gobernar, administrar, tomar nuevos acuerdos y decisiones así como comunicar. Se anticipa una visión distinta e intención de hacer otra forma de hacer política y gobernar  diferente en todos los temas. El reto,  concluyó el ex mandatario oaxaqueño , es demostrar que las cosas se pueden hacer de manera diferente  y que se tienen que hacer con la sociedad y con  nuevas instituciones. Se trata, dijo “de no caer en regresiones autoritarias y similaciones democráticas para sentar un precedente a nivel nacional  en el ejercicio democrático suscitado en Oaxaca que estará vigilado con lupa y que no dudo que será favorable para el estado”.