Oscar VALDIVIESO Oaxaca, México.-  A seis años el abuso sexual contra un niño indígena  por  el dueño del Diario Olmeca de Tabasco, José Antenor Rodríguez Ancona, este delito  sigue impune y sin castigo ante la omisión de las autoridades judiciales.      [caption id="attachment_57097" align="alignright" width="300" caption="Impunidad de Rodríguez Ancona por ser dueño de un periodico en Villaheromosa,Tabasco"][/caption] Haciendo usos de un  grotesco tráfico de influencias, Rodríguez Ancona, amenazó y pagó sobornos a los dueños de la clínica Juan Graham Casassus  para desaparecer el expediente médico de las lesiones que presentaba el menor de seis años de edad,  luego de la agresión sexual de que fue objeto y despedir al doctor residente que lo atendió.     El Comité de Derechos Humanos “San Francisco de Asís” Centro de apoyo de Comitán de las Flores Estado de Chiapas, documentó este caso ya que tanto el menor y su madre son originarios de Tapitula,  Chiapas.     Según el testimonio de la madre del menor, Verónica Santiago Méndez, los hechos se registraron el 13 de febrero del 2004, cuando el dueño del Diario Olmeca, la mandó al centro comercial por lo que dejo a su hijo en el cuarto de la servidumbre, en la residencia ubicada en el fraccionamiento Real del Sur de Villahermosa, Tabasco   Cuando Verónica regresó 2 horas más tarde encontró a su hijo llorando y sangrando escondido debajo de la cama, vistiendo sólo una camiseta, ensangrentado, aterrado, con la mirada extraviada, sin poder hablar y temblando.     Llena de pánico la señora al revisarlo descubrió que el pequeño Heriberto estaba muy golpeado en su cabeza y sangraba, por lo que de inmediato lo llevó  al hospital Juan Graham Casasus.   Horas después de haber sido atendido, el niño contó al psicólogo Fredy Pérez que el Ancona Rodríguez había entrado a la habitación pocos minutos después de que su madre salió y le comenzó a tocar en sus genitales y a besarlos. Como se resistió, el dueño del Diario Olmeca sacó una pistola y lo golpeo salvajemente.     En el reporte que el médico enseño a su madre, se describió  que el niño sangraba del área genital-anal, aparte de presentar numerosos golpes en distintas partes del cuerpo,  por lo que requirió de sutura para cerrar la herida en el área anal y cerca de once puntos en la parte trasera de la cabeza, además en el pómulo izquierdo por una herida provocada por un fuerte golpe con una pistola.   Luego, Ancona Rodríguez acompañado de su madre, Griselda Ancona, llegaron a un acuerdo con el  director del hospital, de apellido Azuara y el doctor Fernando Mayans, quienes sacaron de la clínica al menor y a su madre y destruyeron los reportes médicos.   Ancona Rodríguez también amenazó de muerte al médico residente, el cual fue despedido, aunque los directivos del hospital argumentan, que fue becado para cursar una especialidad en Salamanca, España   Verónica y su hijo, fueron llevado a la fuerza a la casa del agresor sexual par que sacara sus pertenencias  bajo la amenaza de  no denunciar el hecho si no quería que mataran a Heriberto y la metieran a la cárcel por robar objetos de la residencia de  Rodríguez Ancona.   Tras llevarlo a golpes a la estación de camiones de segunda en la ciudad de Teapa, Tabasco y enviados de regreso a Tapilula, Chiapas, Heriberto en el trayecto comenzó a sangrar, por lo que fue atendido de emergencia en el hospital de Tuxtla Gutiérrez.     Ante el silencio de medios de comunicación y autoridades judiciales del estado de Tabasco, los defensores de derechos humanos que llevan el caso realizaron una denuncia pública ante la impunidad de Rodríguez Ancona.    Se hace un llamado a la ciudadania de Tabasco a realizar un boicot en contra del Diario Olmeca para que no quede impune este abuso contra Heriberto.