*Objetivo: que haya justicia y evitar violencia entre hermanos, dice

Oaxaca, México.- Al manifestar su preocupación por los hechos de violencia acontecidos en la zona triqui, así como entre Chalcatongo de Hidalgo y Santo Domingo Ixcatlán, el gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué sostuvo que durante su administración se pondrá una atención especial a los conflictos sociales y agrarios apelando a la colaboración del gobierno federal.

En conferencia de medios y a pregunta expresa, señaló: “El gobierno no puede estar sólo como observador y ver que entre hermanos se estén agrediendo y no hacer nada; debemos actuar para evitar la violencia”.

Por lo que cuando asuma el cargo, precisó, habrá que estar muy pendientes de las zonas que se consideran de conflicto, zonas de alto riesgo, y precisamente una de ellas es la de los triquis, problemas que deben resolverse a través del diálogo, de la conciliación y de la concertación.

El futuro mandatario estatal aseguró que estos conflictos, sobre todo en la zona triqui, están asociados con la marginación y la pobreza, y con rezagos ancestrales.

“Tenemos en esta región una alta tasa de marginación; nosotros en su momento, vamos a actuar de acuerdo con nuestras posibilidades para que vuelva la paz y la armonía a estos pueblos”, manifestó Cué.

Comentó que lamentablemente se han registrado asesinatos y recordó el caso del observador de derechos humanos, el finlandés Jyry Jaakkola, quien murió el 27 de abril en San Juan Copala, cuando integraba una caravana de misión humanitaria.

Informó haber tenido un encuentro con los padres del pacifista asesinado y otros con actores que tienen cierta relación con grupos que tienen presencia en la zona triqui.

Pero será a partir del primero de diciembre cuando haya acciones y propuestas concretas por parte del nuevo gobierno para que regresen la paz, el progreso y la justicia social a la zona.

Para ello será fundamental la intervención de las instancias federales que les competen directamente muchos de estos problemas, aseveró.

En el caso del diferendo entre Chalcatongo e Ixcatlán, dijo que es un tema muy delicado, pues está el antecedente de un asesinato múltiple, “ahora tenemos conocimiento de una nueva confrontación”.

“En Oaxaca tenemos muchos problemas, asociados a los conflictos agrarios. El de Chalcatongo como otros más que se tienen en otras regiones del estado, también tiene que ser nuestra prioridad, vamos a apostarle al diálogo, a la conciliación, a la concertación”, reiteró el mandatario electo.

Recordó el caso de Teojomulco, ubicado en la Sierra Sur, que tenía un conflicto con sus vecinos de Texmelucan y llegaron a un acuerdo en común.

Para apurar su solución, el gobierno federal se comprometió a destinar un recurso, pero faltaba el del gobierno estatal, por lo que él como senador de la República presentó un punto de acuerdo para que se agilizara esta situación, recordó.

La experiencia que esta situación nos deja, añadió, es que hay que cumplir los compromisos con el fin de que haya paz y armonía entre las comunidades en conflicto. “Los gobiernos tienen que asumir su responsabilidad. Nosotros vamos a tener estos casos como parte de una agenda prioritaria”, reiteró.