Carolina QUEZADA Oaxaca, México.-  El pintor Francisco Toledo,  visiblemente molesto, demandó al gobernador Gabino Cué Monteagudo, pedir la renuncia  inmediata a  todos los perredistas “incrustados en el gabinete porque ni la primaria terminaron”. Al  dictar la conferencia magistral “La academia ante la transición en Oaxaca” realizada en el auditorio  de la Universidad Anahúac, el artista indicó  en su ponencia que “la educación es un bien sagrado para los individuos  a fin de poder redituar en el bien de su comunidad”. [caption id="attachment_84845" align="alignright" width="220" caption="Toledo "echandóse un taco" antes de dictar su conferencia"][/caption] Por ello, expuso “no es posible que quienes tienen la responsabilidad de dirigir los destinos de Oaxaca, registren  tan bajos niveles educativos cuando se cuenta con una gama de universidades privadas y un magisterio que sea caracterizado por su apostolado a favor de la educación”. En un auditorio abarrotado y ávido de escuchar  a quien se ha distinguido por promover el quehacer cultural en la entidad, Toledo hizo uso de la palabra por más dos horas para hacer una reflexión de  lo que debe ser la academia partiendo de la visión de Franz Kafka. ¿Es qué acaso Oaxaca es un estado kafkiano o que alguien me explique? Cuestionó con desesperación que hizo que su cabello se crispara más de lo acostumbrado. Luego una nube de reporteros, lo abordaron al término de su conferencia, pidiendo que las cámaras no usaran luz, al justificar que “los reflectores me resecan la piel”. ¿Qué opina sobre los títulos?  Se le inquirió Bueno, Gabino debería renunciar en primer lugar a los perredistas, mis paisanos ya que ni a la “nocturna” (escuela) asistieron. Toledo aprovechó entonces para presumir su título académico, otorgado hace cuatro años por la UABJO: Mírenme a mí, yo hasta soy Doctor Honoris Causa y no estoy en el Gabinete. Luego con celular al oído y abordando su BMW rojo pasión, no sin antes colocar su lentes Ray-Ban  Toledo partió hacia el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, en donde festejó tremenda “inocentada”  por el 28 de diciembre.