Fortino Torrentera O.   Oaxaca. México. Laureado poeta, traductor, ensayista, incansable impulsor de las letras y la cultura. David Huerta, ofrendó ayer con su poesía al pintor oaxaqueño, Francisco Toledo.   Durante “Inventario de asombros”, lectura de poesía celebratoria por los 70 años de Francisco Toledo, recordó que uno de sus primeros trabajos con el pintor juchiteco, fue en un proyecto editorial.     [caption id="attachment_65177" align="alignleft" width="256" caption="El poeta mexicano, habló de su relación con el maestro Toledo."][/caption] Recordó que recibió la invitación para sumarse a la integración de la carpeta “Los cuadernos de la mierda” con la que el maestro Toledo pagó en especie sutilmente a la Secretaría de Hacienda cuyo titular entonces mostró su tacto al prologar esa escatológica obra.   De ella leyó “Canción de la inquietud”, “La noche del cuerpo”, “Los dioses de Francisco Toledo”, “Fuente flor” y “Papeles” inspirada en el pintor dibujando como una glosa que surge de una pieza cómica de Luis de Góngora y Argote.   Quien ha obtenido premios como el de Poesía Carlos Pellicer en 1990, y el Premio Xavier Villaurrutia en 2006 cerró su intervención con “Perro de Goya”, construido a partir de un perro semi-hundido en la arena que plasmó el pintor español, “poema que dedico a todos los perros que crean en sus obras los pintores”.   Momentos más tarde, con su característica sencillez, Huerta, quien destaca por su labor de difusión de la literatura y de la poesía ha sido amplia, como coordinador de talleres literarios en la Casa del Lago de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y del ISSSTE, así como maestro de literatura en cursos de la Fundación Octavio Paz y de la Fundación para las Letras Mexicanas, habló de la aportación del pintor juchiteco.   - Acude hoy a una cita para celebrar a un amigo ¿Cómo ha sido su relación con e maestro Toledo?   - Ha sido una amistad más o menos tenue, pero por mi lado llena de gusto y de placer, pero creo que está muy contento por tanta bulla, aunque no le guste, es muy tímido y poquito cortado.   No he hablado mucho con Francisco Toledo, pero las veces que estado con él en alguna reunión  o en alguna comida de amigos, han sido momentos memorables.   Ahora que llegué, algunos amigos de Oaxaca me contaron que al comentarle a Toledo que acudiría a esta lectura, me dio alegría que me haya recordado, pues dijo con mucho gusto: “Que bueno que venga por que su mamá es de Zaachila”.   Eso me dio mucho gusto, porque sé que me tiene presente a mí y presente a mis raíces oaxaqueñas.   - ¿Cómo nota el trabajo de acompañamiento que el maestro Toledo ha hecho con la literatura en México?   - Es muy importante la labor de Toledo porque siempre ha estado muy presente con los escritores de México, relacionado íntimamente a la producción de poetas y editores de libros y revistas.   Toledo es un promotor cultural, es un ser que mantiene viva a la cultura y no nada más pinta, graba o hace cerámica y con lo cual estaríamos servidos, satisfechos; pero él va más allá y ha visto por la cultura en el país, creo que es algo maravilloso.