Oaxaca, México..- Con tres piezas que dieron cuenta del legado dancístico de uno de los más notables coreógrafos a nivel mundial, la Merce Cunningham Dance Company, hizo brillar el escenario del Palacio de Bellas Artes con una dramaturgia corporal de alto nivel, enmarcada por los decorados realizados por los padres del arte pop, Andy Warhol y Roy Lichtenstein.
En la función, en la que estuvo presente Consuelo Sáizar, presidenta del Conaculta, se presentaron las coreografías
Pond Way,
MinEvent y
Rain Forest acompañadas en vivo por músicos y efectistas, además de pistas sonoras creadas por artistas de gran renombre como Brian Eno.
El espectáculo inició con la pieza
Pond Way, cuya escenografía es el mural titulado
Landscape with Boat, realizado por el artista Roy Lichtenstein para el estreno de esta obra en 1998 en el Palacio Garnier, de París.
Los bailarines ataviados de blanco realizaron diversos trazos corporales que destacaron por su destreza técnica y la agilidad de sus movimientos, que por momentos parecían fundir los cuerpos con la obra de Lichtenstein, realizada en blanco y negro con los característicos puntos que forman figuras que han inmortalizado a este artista.
A continuación fue presentada la coreografía
MinEvent, con el mural de múltiples colores titulado
Immerse, realizado por el artista Robert Rauschenberg.
Destacaron los simbolismos de esta pieza que retrata el ritmo y la rutina de las sociedades posmodernas y donde los bailarines ataviados con trajes futuristas en tonos rojos y naranjas, bailan en soledad, siguiendo patrones similares hasta que abruptamente un hombre y una mujer se unen, rompiendo la rutina y creando sus propios movimientos.
La pieza fue musicalizada en vivo con instrumentos electrónicos ejecutados por John King, Takehisa Kosugi y Jesse Stiles, quienes crearon a su vez efectos de sonidos concretos que asemejaban rasgaduras de tela o los barridos de aguja de los antiguos discos de acetato.
La noche cerró con la pieza
Rain Forest, uno de los trabajos más emblemáticos de Cunningham, estrenado en 1968, con los decorados realizados por Andy Warhol, titulados
Silver Clouds, consistentes en diversos globos plateados que rodean el escenario y que parecen crear su propia danza paralela con los movimientos de los bailarines.
Destacaron los diversos cuadros coreográficos y solos de los ejecutantes, quienes logran atrapar al espectador en una atmósfera onírica en la que los cuerpos se tornan figuras movibles plasmadas en un gran lienzo conceptual.
La presentación en México de la compañía forma parte de la
Gira del Legado, con los bailarines entrenados personalmente por el legendario Merce Cunningham, quien hasta sus últimos días solía asistir a los ensayos en silla de ruedas.
Esta serie de presentaciones en el Palacio de Bellas Artes continúa los días 25 y 26 de agosto a las 20:00 horas y el sábado 27 de agosto, a las 19:00 horas. Las funciones representan una de las últimas oportunidades para ver juntos a los artistas formados por el mítico coreógrafo, quienes a fines de 2011 disolverán la compañía para realizar proyectos personales.