Nathalie GÓMEZ/IGABE
Oaxaca, México.- Alejandro de Jesús Vera Guzmán, músico y escultor mixteco, inició sus trabajos desde los tres años elaborando las tradicionales máscaras que portan los conocidos como Diablos de Juxtlahuaca, municipio de donde es originario, cuyo estilo hoy es reconocido a nivel internacional en museos de California donde sus obras son puestas en exhibición.
En entrevista, dio a conocer que cuando tenía 12 años hizo su primer máscara de madera, siendo en 1990 cuando ganó un tercer lugar a nivel nacional en el concurso nacional de máscaras “Las caras de México” en la ciudad de México, a pesar de que no había ningún maestro, ni una persona que le enseñara a elaborar las tradicionales máscaras, por lo que pudo crear su propio estilo.
Por este motivo, le dio un valor artístico a estos elementos representativos de Juxtlahuaca, puesto que consideró que debían ser más estéticas ya que con frecuencia, “pensamos que las artesanías tienen poco valor y son discriminadas obras muy importantes de los oaxaqueños”.
Expresó que en 1992, ganó el primer lugar en el concurso nacional de artesanías “El encuentro de dos mundos” y en 1997 fue nominado al Premio Nacional de Ciencias y artes en el campo VI, pues aunque algunas máscaras son vendidas en precios de mil 800, sobre todo a los oriundos de la Mixteca, recientemente pagaron 25 mil pesos por adquirir una de sus piezas.
Recientemente, llevó a cabo exposiciones de sus obras en Fresno y Madera, en California, donde en cada pieza hace alusión al diablo, de lo que expresa que lo elabora como considera que es, hecho que le da la libertad de manifestar sus pensamientos sin perder la originalidad que lo caracteriza en cada pieza que elabora.
Dentro de las características de las máscaras tradicionales del músico y escultor, es que utiliza la madera de Sabino o Ahuehuete, madera muy tradicional en la región Mixteca, labrada en talla natural, técnica que ha trabajado desde sus inicios en el mundo de las artesanías.
Trabajan de las 8 de la mañana hasta las 3 o 4 de la madrugada es parte de la elaboración de las mascaras, las cuáles no se venden por el valor comercial, sino como piezas de arte, afirma Vera Guzmán, por lo que los interesados acuden a Santiago Juxtlahuaca para adquirir una de sus piezas, motivo por el cual, en la actualidad tiene máscaras encargadas para vender a gente que proviene de Alemania, Francia, España y Estados Unidos.