Oaxaca, México.- Con el objetivo de reflexionar sobre el uso de las nuevas tecnologías en el periodismo cultural y sus consecuencias se realizó la primera conferencia “El relato hecho añicos: tecnología y escritura” del Seminario Nuevas Rutas para el Periodismo Cultural, este lunes en el Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes.
La mesa fue moderada por Jaime Abello Banfi, director general y cofundador de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI), y en ella participaron como ponente el autor, bloguero, columnista y maestro de la FNPI Francis Pisani, y como comentarista el director editorial de la revista
Replicante y colaborador en la revista
Milenio Semanal, Rogelio Villarreal.
Al iniciar la conferencia, Francis Pisani comentó que hoy día los periodistas de cultura son reacios a usar la tecnología y explicó que las nuevas tecnologías están provocando cambios destacados en tres aspectos importantes que no se pueden ignorar, debido a sus consecuencias, pero principalmente porque todo el mundo está implicado en ellos: en la sociedad, en el arte y la cultura, y en el periodismo.
En lo relacionado a los cambios en la sociedad destacó que lo que generan las nuevas tecnologías “es un nuevo tipo de individualismo, marcado por una manera diferente de relacionarse con los grupos y las comunidades alrededor del mundo”.
En lo concerniente a los cambios en el arte, detalló que la tecnología digital ha transformado actividades como la pintura, el diseño y la escultura, y ha permitido emerger otras como el arte en la red, el arte-instalación y el arte-realidad virtual.
También particularizó los cambios provocados por las nuevas tecnologías en el periodismo: cambios tecnológicos, en la cobertura, en la organización, en la distribución (
off line-on line), en el relato y la forma de relatar.
“Estos cambios fueron provocados porque pasamos de surfeadores e infonautas, a actuar, hacer, producir y subir cosas. En este sentido la gente se volvió participativa porque tiene las herramientas en sus manos y en ocasiones está donde los periodistas no, por ejemplo, en las catástrofes”.
Añadió que también se modifica el valor de la información ya que tiende hacia cero, debido al exceso de la misma. “En este sentido, el reto hoy es filtrar y estructurar únicamente todo aquello que es accesible y útil tanto para ciudadanos como para empresas e instituciones”.
Comentó que debido a las nuevas tecnologías, el periodista cumplirá una nueva función “la de curaduría”, es decir, tendrá que seleccionar, contextualizar, estructurar, poner en perspectiva y darle sentido únicamente a elementos informativos que le sean de utilidad.
“Porque la nota no existe. Ahora los contenidos son organizados en temas que son espacios de conversación modular alrededor de una información. La nota ya no es un producto acabado, ya no la componen uno o dos periodistas, sino que la compone mucha gente.
“Esto implica un cambio en la manera de cubrir lo que pasa en el mundo, en lo que da sentido social a las cosas y en la función del periodista, ya que antes tenía el monopolio del acceso a las fuentes, al micrófono, la imprenta o a la televisión, pero hoy en día es uno más entre otros.
“En este sentido, vemos que la realidad hoy está siendo profundamente alterada por las tecnologías de la información y por eso la debemos abrazar con pasión siempre crítica”.
También reveló que existen tres macro tendencias de la evolución de las tecnologías que van a afectar a todos, principalmente a los periodistas culturales.
La primera es la hiperconectividad a través de las redes sociales y del Internet de los objetos. La segunda es el Tsunami de datos que da lugar a un periodismo de datos, es decir, “a un periodismo profundo en donde hay que saber manejar información que llega en cantidades enormes y con programas que son mucho más sofisticados que Excel”.
Y un tercer elemento, que es la movilidad y ubicación. “Esto se refiere a que las nuevas tecnologías nos permiten desplazar por todos lados pero siempre con una infraestructura que transmite lo que estamos realizando, ya que siempre estamos conectados de manera personalizada, individualizada, es decir, llevamos nuestra cultura en el bolsillo”.
En su intervención, Jaime Abello Banfi explicó que gracias a las nuevas tecnologías los reporteros tienen más posibilidades “de hacer un periodismo creativo, participativo, rico, que genere día a día nuevas formas del relato y al mismo tiempo nuevos modos de relacionarse entre los periodistas y el público para lograr sociedades mejor informadas con estas herramientas y con todas las posibilidades que las tecnologías nos ofrecen”.
Para finalizar la conferencia, Rogelio Villarreal expuso las consecuencias del uso de las nuevas tecnologías.
En lo relacionado a los beneficios mencionó que gracias a ellas se está construyendo un acervo histórico que revoluciona la forma en que leemos, vemos un texto y comprendemos el mundo, gracias al manejo de la hipertextualidad que fomentan los medios digitales y que hizo posible otras formas de producir libros, literatura, conocimiento “y desde luego maneras novedosas de concebir y practicar el viejo oficio del periodismo.
“También gracias a ellas, con la red es muy fácil detectar imprecisiones, falsedades y plagios en el trabajo periodístico, así como también, es más difícil que autoridades de todo tipo puedan engañar al público o a la ciudadanía con datos o información maquillada o tendenciosa”.
Habló sobre la transición de lo impreso a lo digital y cómo las nuevas tecnologías han afectado al periodismo, en especial al periodismo cultural, en cuestiones tan elementales como la carga del trabajo y la investigación.
“El periodista es mal pagado. Ahora debe producir más contenidos para el diario, su sitio web e incluso para sus programas de radio o televisión. Esto desgasta y desmerece el trabajo del reportero que se ve obligado a tomar declaraciones de boletines y hacer cada vez menos periodismo de investigación.
“En este sentido, la tecnología digital y sus ventajas no son para todo el mundo a pesar de su vertiginoso crecimiento, debido a la pobreza, el desempleo y la ausencia de políticas educativas, y de desarrollo científico y tecnológico”.
Agregó que las nuevas tecnologías pueden cambiar positivamente el mundo, pero sólo si éstas pueden crecer en un ambiente de libertad y respeto. “Si los medios son las extensiones del hombre, como decía McLuhan, en el siglo digital las nuevas tecnologías deben de estar al servicio del crecimiento y desarrollo pacífico de mujeres y hombres del todo el planeta”.
El Seminario Nuevas Rutas para el Periodismo Cultural continúa este martes 20 de septiembre con la conferencia “El cuento de nunca acabar”, en donde participará como ponente Héctor Feliciano (Puerto Rico), Aurora Noreña (México) como comentarista y María Scherer (México) de moderadora.
Nuevas Rutas para el Periodismo Cultural, se realizará durante esta semana, hasta el 23 septiembre a las 17:00 horas en el Teatro de las Artes del Centro Nacional de las Artes que se ubica en Río Churubusco 79, esq. Calzada de Tlalpan, Col. Country Club. Entrada gratuita. Cupo limitado.
Las conferencias se transmiten en vivo en las páginas:
www.fnpi.org y
www.conaculta.gob.mx.