Anayeli GARCÍA MARTÍNEZ/CIMAC
Oaxaca, México. “Hoy el reto es histórico, el reto es la erradicación y el combate a la violencia contra las mujeres en todo el país”, recalca Dilcya García Espinoza de los Monteros, titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), en medio de una guerra contra el narcotráfico que ha disparado la cifra de desapariciones y asesinatos de mexicanas.
“Cuando uno llega a estos cargos efectivamente existen pendientes. Creo que entre los más grandes que hay es que haya más centros de justicia, los cuales son espacios donde las mujeres llegan a encontrar respuestas muy concretas por parte del Estado. Ahora tenemos cinco (en todo el país) pero buscamos muchos más para el 2012”, dice la funcionaria en entrevista con Cimacnoticias.
Desde agosto pasado, Dilcya García está al frente de la Conavim, instancia creada en 2009 y que ha sido severamente criticada por organizaciones civiles que la han acusado de no erradicar la impunidad en los asesinatos de mujeres, y de incumplir su compromiso de garantizar medidas de protección para las víctimas de violencia de género.
“Voluntad política”
Ante esos embates, la comisionada afirma que hay “voluntad política” para atender esta problemática y advierte que “el tema de las mujeres está en la agenda política prioritaria”, aunque al mismo tiempo aclara que los pendientes del Estado son varios.
Sostiene que entre los pendientes de la Conavim está reglamentar la Alerta de Violencia de Género (AVG), cumplir con las recomendaciones del sistema interamericano de Derechos Humanos, y dejar listo un diagnóstico sobre la violencia contra las mujeres en todo el país que coadyuve a la creación de políticas públicas con perspectiva de género.
Dilcya García dice que su compromiso es coordinar a las diferentes dependencias del Estado para “acelerar” el cumplimiento de las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH) contra México, en los casos de las indígenas Valentina Rosendo e Inés Fernández, violadas por militares; y de las ocho mujeres asesinadas en Campo Algodonero, en Ciudad Juárez.
Cabe recordar que entre las recomendaciones derivadas de estos fallos están la estandarización de protocolos de investigación y una base de datos sobre mujeres desaparecidas y asesinadas.
Al respecto, la funcionaria señala que ya se solicitó a la coordinación general de Servicios Periciales de la Procuraduría General de la República que comparta su base de datos de información genética y “material óseo”.
“En virtud de los mandatos de la Procuraduría General de la República es una base de datos universal que tiene una perspectiva de genero y que tiene bien señalizada la población de aquellas mujeres que están desaparecidas”, afirma.
Cuestionamientos
Otro pendiente de la Conavim es la elaboración de un estudio sobre violencia de género. En 2010 la comisión fue acusada de subejercer ocho millones 508 mil pesos destinados al Diagnóstico Nacional sobre todas las Formas de Violencia contra las Mujeres, y al Programa integral de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia.
En ese momento la anterior administración de la Conavim –encabezada por Laura Carrera– informó que la UNAM fue contratada para realizar esos estudios. Sobre este tema, Dilcya García señala que un grupo de expertos en demografía y en violencia de género “está elaborando” el diagnóstico.
“Lo estamos haciendo. Es un diagnóstico muy ambicioso, es un diagnóstico antropológico que tendrá que ver con los orígenes de la violencia contra las mujeres en el país, pero además cómo se concatena con la violencia social”, abunda.
“Lo estamos haciendo a partir del CRIM (Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias) de la UNAM, y vamos a tener este estudio en octubre del 2012 ya terminado porque además requiere estudios antropológicos que requieren meses”, añade.
“Hay más denuncias”
La Conavim sucedió a la Comisión para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en Ciudad Juárez, creada en el sexenio anterior. Organizaciones civiles afirman que la situación de violencia de género en la localidad fronteriza sigue igual o incluso peor.
No obstante Dilcya García asegura que la situación en Juárez sí ha cambiado: “(Ahora) está visibilizado dentro del Estado; por ejemplo, la sociedad está más organizada, tiene un nivel altísimo en cuanto a interlocución, información y defensa de las mujeres”.
¿Ha bajado el número de homicidios de mujeres?, se le pregunta, y responde: “No, no podría decir que han bajado o han aumentado los homicidios, porque para esto tienes que hacer un recuento de estadísticas demográficas con estadísticas judiciales en materia penal, hacer el contraste y definir si han subido o bajado”.
La comisionada indica que hasta octubre pasado había un registro de 140 mujeres desaparecidas en el año en Juárez, y destaca que actualmente hay un mayor número de denuncias, al menos más que hace unos años.
“Eso puede ser bueno o malo, pero no nos dice con precisión si han subido o han bajado (los casos de feminicidio)”, insiste.
García señala que otra de sus principales tareas para 2012 es reglamentar la AVG, para que sea un mecanismo eficaz a través del cual se enfrente una situación de extrema violencia contra las mujeres.
“Se está buscando la construcción de un protocolo que genere especificaciones para definir cuándo se tiene que hacer la declaratoria de alerta de género en un municipio o en una entidad federativa, porque no voy a permitir que se utilice de una manera política”, advierte.