Oaxaca, México.- Diego El Cigala llevará a la 39 edición del Festival Internacional Cervantino el programa Cigala & Tango. En entrevista vía telefónica desde Madrid, el artista agradeció la oportunidad de participar en un festival "que tiene tanto auge e historia, es maravilloso. Llevamos siempre a México entero en el corazón, un país que siento mi segunda casa". El interprete estará acompañado por Jaime Calabuch al piano, Diego del Morao en la guitarra, Yelsy Heredia en el contrabajo, Sabú Porrina en percusión y Bernardo Parrilla en el violín. El programa incluye Los cuarenta de Roberto Grela, El día que me quieras de Carlos Gardel y Garganta con arena de Cacho Castaña. Para Diego El Cigala, gran exponente del flamenco, el "duende" o alma del canto, lo debe uno traer desde que se nace: "hay que nacer con esa chispa que con el tiempo se sigue formando. El "duende" es también una cuestión inexplicable, porque cuando lo busca no llega y llega cuando menos te lo esperas. Pero hay que nacer con él. Yo lo obtuve desde que estaba en el vientre de mi madre, por eso salí cantando. Dice mi madre que desde pequeño me ponía a pegar brincos". Al hablar del tango, el gitano que ha dicho que puede elegir cualquier canción y recantarla a su modo con su ritmo interno y duende, amoldándola al cante jondo cigaliano, comentó que en el tango: "pongo el corazón y el alma. De lo que se trata es de sentirlo, de la misma forma que he sentido el bolero y la música afrocubana. Con el tango me he sentido tan cómodo que llegué a preparar este espectáculo". En mi quehacer no tengo ideas preconcebidas, todo es natural, me he dejado llevar por los temas que me gustan y también escuchando a los grandes como Marconi y Juanjo Domínguez.  "Un tango, para que lo interprete debe tener jondura, misterio, feeling, swing y que me llegue al alma, que la letra y el tema me cautiven, como ha sucedido con El día que me quieras o Nostalgia." "Siempre me he sentido muy cómodo en la música afrocubana y latina. Donde me siento libre y feliz, ahí me meto, siempre sin perjudicar a esas músicas. Me encuentro actualmente buscando temas mexicanos para grabarlos, algunos son de José Alfredo, incluyendo canciones inéditas de él, porque es un icono de la música mexicana. Ha dado mucha gloria a México. Sus letras tienen mucho más corazón y más mensajes, con todo mi respeto a otro gran compositor, Agustín Lara". Ramón Jiménez Salazar (es el nombre que aparece en su pasaporte) anunció que además del programa de tango que presentará en el Cervantino ofrecerá un compendio de los tres discos, entre ellos de Lágrimas negras y como regalo cantará "probablemente" una canción ranchera de José Alfredo que recientemente grabó con Óscar de León: Vámonos; Alfonsina y el mar de Ariel Ramírez y Félix Luna, y la milonga Los hermanos de Atahualpa Yupanqui. El Cigala afirmó que flamenco es un estilo de vida con el que se vive siempre: "en mi casa, donde me encuentro todo el día con mis hijos, estoy rodeado de flamenco. Cuando todo el mundo está durmiendo yo estoy levantado y la música es una manera de vivirla y sentirla". Diego El Cigala nació en 1968 en Madrid. A los doce años de edad, ganó el primer premio del Certamen Flamenco Joven de Getafe. Su trayectoria profesional inició cuando cantó para artistas de la talla de Cristóbal Reyes, Mario Maya, Manolete, Farruco y Manuel Camacho. También colaboró en grabaciones con músicos como Tomatito, Gerardo Núñez y Paco de Lucía, entre otros. Tiene los álbumes, Corren tiempos de alegría, álbum en el que colaboraron Bebo Valdés y Jerry González. La grabación fue nominada al Grammy Latino como mejor disco flamenco del año. En 2005 regresó al flamenco con Picasso en mis ojos, un homenaje al pintor malagueño, el cual fue disco de oro en España y Venezuela. En 2007 grabó Dos lágrimas, en el que participaron grandes músicos cubanos y españoles. Y como sabemos que siempre en el último minuto antes de salir al escenario, Diego siempre piensa lo mismo, en octubre se dirá: "Anda, Cigala, sal y canta", y así lo hará en Guanajuato.