Lesli AGUILAR/IGABE Oaxaca, México.- El carnaval en Putla tiene su auge 5 días antes al miércoles de ceniza, -el cual es el primer día de la Cuaresma en los calendarios litúrgicos católico, protestante, y anglicano. Mismo que se celebra cuarenta días antes del inicio de Semana Santa, es decir, del Domingo de Ramos-. Comenzó desde este 4 de marzo con el baile de Coronación de la Diosa Copala, Yosiant Riaño Jiménez, el sábado 5 de marzo se realizó la coronación de la Reyna de los Viejos, Amara Arias Terrones, el domingo 6 de marzo la coronación de las Novias de la Danza del Macho , Nayeli Moreno, asimismo este mismo día se realiza el desfile de las comparsas del carnaval putleco, el 7 de marzo es el gran concurso de los disfraces en donde los Tiliches salen por las calles a ambientar a propios y extraños. Finalmente el 8 marzo se desarrolla la comida de la mayordomía de la Comparsa de los Viejos, así como la tradición del robo y entrega del presente al sacerdote, y el baile del cierre del carnaval, finalmente la entrega del presente al sacerdote, la cual es pan de yema con chocolate, y excremento de animales que retratan los pecados de los seres humanos. “El carnaval de Putla: es euforia y alegría, es derroche de entusiasmo; es vivir la fantasía. Todos suelen alegrar; las calles de nuestro pueblo y de música llenar, Entre sonrisas alegres los viejos de ambiente llenan, desparraman el tepache, a dormir mandan las penas. la comparsa de los viejos es lo auténtico putleco; bules, sombreros de palma y caretas de conejo”, describe José Ángel Méndez en su poema, “El Carnaval de mi pueblo”. La Fiesta de los viejos La comparsa de los viejos es, de las tres, que se presentan durante las fiestas de carnaval la que más gusta, la más alegre, la que mejor ambiente realiza, la algarabía de la danza tradicional de la gente. Esta compañía tienen varios aspectos que resaltan: el toro de cuero, la ropa de tiliches, la máscara, las bromas al sacerdote, el robo del dinero, las varas de buchicata y la reina. Su entusiasmo y alegría motiva a los lugareños y visitantes a bailar de manera individual o en conjunto, alrededor del toro hecho con madera y forrado de cuero. El toro lo cargan y bailan todos los disfrazados, pelean por poseerlo, lo disputan, se divierten en el jaloneo y de pronto, peligrosamente, lo lanzan al aire para que otros lo atrapen. El compás de la música no obliga a realizar pasos al unísono o una coreografía coordinada, las melodías sólo justifican la alegría que se expresa al libre entendimiento, así se escucha chilenas, propias de la costa chica; sones regionales y jarabes mexicanos, una gran variedad que envuelve el recorrido por toda la población, deteniéndose en algunas casas por invitación de las familias. De acuerdo a los participante del carnaval, en los últimos años se ha vuelto obligado un popurrí interpretado por el grupo “Furia oaxaqueña”, que ha titulado como “Carnaval putleco” y que contiene: la paloma y el palomo, el carnaval del gallito, la vaca, el correlón, la cucaracha, el gallito, la vaca, el palomo correlón, los viejos, el jarabe tapatío y la diana; a fuerza de repetición este popurrí ha emergido como la música representativa del carnaval de Putla. La baile El recorrido tiene paradas obligadas como el palacio, para saludar a la presidenta e invitarla a que baile y cargue al toro, también en la plazuela “Hidalgo”, en donde la comparsa luce su esplendor con cientos de danzantes que “abarrotan el espacio”. También se realiza una visita al templo, porque el sacerdote no se puede escapar del festejo hay que motivarlo a que baile, a gastarle bromas y en compensación, entregarle un regalo o un recuerdo. Al salir del templo los mayordomos llevan consigo un tenate de dinero, se dirigen a la plazuela “Hidalgo”, ahí todos los viejos ya se encuentran armados y con varas de buchicata, un arbusto que abunda en el pueblo. El tenate de dinero será robado. Unos cuidan y defienden que nadie se robe el tenate, pero la gran mayoría lo intenta robar, en una fuerte batalla alguien lo roba, al instante todos se van contra él, golpeándolo con la varas de buchicata persiguiendo al “Ladrón”, que al fin logra escapar. Los disfraces, las máscaras, la incógnita La ropa que usan los danzantes, aparenta tela vieja, deshilada. Es un tipo overol forrado de capas y capas de tela a la que se le hacen cortes conocidos como tiliches. Se dice que en los inicios de la comparsa, la ropa era usada, como la de los indigentes que piden limosna, llenas de remiendos y parches, hasta que derivó en tiliches que hacen juego con el sombrero de palma verde de puntas largas y gruesas sin planchar, conocido como sombrero Aniceto”. La máscara es de “Zacate”, adornado con cejas, bigote y barba, hechos de ixtle y una nariz larga como el “moco” de guajolote, hecha con tela. Esta comparsa está muy arraigada por ser la más antigua de las tres. uno de sus iniciadores e impulsores, recuerda que en sus inicios a los danzantes también les llamaban “los marmanos”, ya que para no ser identificados suplantaban la voz, “entonces era como un imitar a los ancianos y el ejemplo concreto es que en lugar de decir mi hermano, decían marmano así se les quedó el nombre hasta cambiarlos por los viejos”. Ahora preside la comparsa de los viejos una reina que en “los hechos se convierten en la reina del carnaval pluteco”, la reina es electa y coronada en el baile de un fin de semana anterior al martes de carnaval, ésta no tiene como misión bailar, sino hacer el recorrido de los danzantes en un carro alegórico. Cabe destacar que esta fiesta está encabezada por la presidenta municipal de Putla Villa de Guerrero, Isabel Bello Chávez.