Samuel GÓMEZ/El Imparcial Oaxaca, México.- A sus 90 años, falleció Doña Genoveva Medina Esteva, incansable mujer que abrió brecha en la política, tras su paso como dirigente de los mercados que la llevó a incursionar en la administración pública, además de ser una férrea defensora de las tradiciones y costumbres. Doña Geno, como se le conocía cariñosamente, murió este jueves  se destacó por  abrirse paso entre una clase política machista, al adherirse al Partido Revolucionario Institucional (PRI), para pelear en principio por una regiduría, y que más tarde la llevaron a ser diputada local y federal. Su habilidad política le permitió convertirse en la primera mujer Senadora de la República e integrar la Comisión de Turismo, a través de la cual impulsó el desarrollo del Estado. Dirigente de la Federación de Mercados por varios años, le permitió a lado del gobernador Víctor Bravo Ahuja, colocar la primera piedra del Mercado de Abastos, y que fue un sueño hecho realidad en la administración de Fernando Gómez Sandoval. Su don de gente le permitió realizar acciones sociales en pro no sólo de sus agremiados, sino de los más desprotegidos, incluso apoyó a la remodelación del templo católico de San Francisco, en donde se le recuerda con cariño. Durante 52 años participó con su grupo de “Chiñas Oaxaqueñas” en las fiestas de los Lunes del Cerro, incluso el año pasado aún acudió a la Guelaguetza del Bicentenario que se realizó en el campo de futbol “Benito Juárez”. Recibió centenares de reconocimientos y entre los últimos, fue el otorgado por la Regiduría de Equidad de Género, encabezada por Bárbara García Chávez, al reconocer la trayectoria de 18 mujeres, en el marco del Día Internacional de la Mujer a celebrarse el 8 de marzo. Le sobreviven sus hijos Isabel del Carmen, Luz Margarita, Silvia y Ángel David Márquez Medina, quienes la recuerdan como una mujer de temple, luchadora social y que jamás se rindió ante las adversidades, lo que le permitió dejar huella no sólo en su familia, sino la política y la sociedad