Oaxaca, México.- Tras reconocer que su administración requiere dar pasos en políticas públicas transversales, el gobernador del estado, Gabino Cué Monteagudo, celebró que funcionarios hayan asistido al Foro de Comunicación Social con Perspectiva de Género que organizó este miércoles el Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO).
“Ojalá que este encuentro sirva como instrumento para que, como servidores públicos, sean cuidadosos de cómo abordan el lenguaje”, dijo al clausurar el foro en el que se presentaron los resultados del “Monitoreo de campañas de difusión del Gobierno de Oaxaca para identificar niveles de reproducción de estereotipos sexistas, desigualdad y violencia de género”, realizado por la investigadora Olga Bustos.
En ese sentido, la directora del Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO), Anabel López Sánchez, anunció un trabajo interinstitucional intenso en la materia que redunde en políticas públicas especificas y alcance a todos los niveles de gobierno: “El tema de la transversalización de la perspectiva de género no es tarea sólo del IMO, sino de toda la administración pública, es incluso una responsabilidad social”.
Explicó que durante la mañana de este miércoles quienes trabajan en las áreas de comunicación de las instancias de Gobierno reflexionaron en cómo al utilizar un lenguaje masculino se excluye a las mujeres. Por ello se distribuyó entre los asistentes un Manual de Lenguaje No Sexista y un Decálogo que orienta en cómo utilizar palabras incluyentes.
Antes la investigadora Olga Bustos presentó el resultado de su análisis de las campañas de la administración gubernamental anterior: En ese muestreo se descubrió que hay más sexismo en las imágenes que en el lenguaje utilizado en la información oficial; se insertan a las mujeres, pero lo hacen en roles estereotipados que la descalifican.
“Más de la mitad de las imágenes analizadas fueron sexistas y el 60% se encontraron en el 4º informe de Gobierno, él único que nos proporcionaron”. Dicho documento fue uno de los 183 materiales analizados de octubre a la fecha, junto folletos de dependencias, periódicos, carteles y spots de radio y televisión.
Así como se excluye a las mujeres en el lenguaje, en algunos casos se registra una sobre representación de ellas, sobre todo en campañas en las que se cree que la problemática atañe exclusivamente al sexo femenino, como la violencia o la transmisión de enfermedades como el Virus del Papiloma Humano, cuando es algo que atañe a toda la sociedad.
Propuso utilizar palabras incluyentes para que poco a poco se deje de utilizar solamente lenguaje masculino y por ejemplo en vez de decir “el ser humano”, el término se puede sustituir por el de “la humanidad”.
Hizo saber que en de la totalidad de los materiales analizados se identificó violencia de género en casi el 25% y sólo el 12% utilizaba lenguaje incluyente. “Es lenguaje sexista porque en primer plano ponen a un hombre y en segundo plano a una mujer”, explicó.
En este contexto la investigadora propuso: “Algo que se tiene que hacer en el nuevo Gobierno, y que corresponderá a las áreas de comunicación, es erradicar estos estereotipos”. Uno de tantos ejemplos citados es que la voz utilizada en las campañas institucionales no debe centrarse sólo en la de un hombre.
La comisionada de Derechos Humanos del Gobierno del Estado, Eréndira Cruzvillegas, opinó que el gran reto del Gobierno del Estado es “generar una nueva arquitectura” en el que la transversalización de género se hace necesaria y obligada.
“En el gabinete actual estamos muy pocas mujeres, algo que se tiene que revisar, pero también es un desafío para que las mujeres demostremos que tenemos la capacidad de ocupar cargos”.
Por su parte, la periodista Soledad Jarquín, también opinó que aunque el monitoreo realizado por la investigadora Olga Bustos se refiere a la pasada administración pública, “es necesario conocer cómo los mensajes contribuyen a zanjar la desigualdad”.
Pero sobre todo, dijo, “es identificar que las instituciones están obligadas a cumplir las leyes, y en consecuencia a evitar el uso del lenguaje no excluyente que perpetúa roles y estereotipos que vapulean a las mujeres cuando las ignora, con hechos y mensajes equivocados, permitiendo esa violencia de género”.
Que el lenguaje sexista no sólo discrimina a las mujeres sino también a los hombres fue un punto que trajo al foro Eduardo Liendro, director de la asociación civil Diversidades: “El sexismo, una de las categorías claves del trabajo de la doctora Bustos, es el trato desigual o discriminatorio por pertenecer a un sexo, no sólo se discrimina a las mujeres, sino también a los hombres, aunque generalmente es hacia ellas porque se trata de una relación desigual de poder”.