Guadalupe Cruz JAIMEZ/Cimac
Oaxaca, México.- Para dejar de ver la muerte materna (MM) como un riesgo “natural” que corren las embarazadas y señalar dónde están las fallas en el sistema de salud que permiten que estos decesos sigan ocurriendo, es necesario visibilizar la problemática en los medios de comunicación, como una violación a los derechos humanos de las mujeres.
Lo anterior, fue expuesto por Lucía Lagunes Huerta, directora de Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC), durante el foro virtual Medios de Comunicación y Mortalidad Materna, quien indicó que la exclusión de la vida de las mujeres de la agenda mediática contribuye a reforzar su desvalorización social.
Durante el foro, organizado por CIMAC, la periodista mexicana refirió que los medios influyen en la percepción que tienen las sociedades acerca de diversas problemáticas, al tiempo que construyen y legitiman agendas sociales y políticas.
Lamentó que actualmente exista “poca cobertura” mediática de las muertes de mujeres por esta causa y otros padecimientos ligados al embarazo, parto y puerperio, lo que atribuyó a la “saturación informativa sobre el crimen organizado”.
No obstante, dijo, que existe “sensibilización de algunas periodistas y algunos medios para colocar el tema”. Este hecho, significa un avance importante en el que aún falta trabajar para que la MM deje de ser vista como “natural”.
“Es necesario que dejemos de naturalizar la muerte de las mujeres, hay una idea arraigada que siempre ofrendamos la vida por los demás, como parte de nuestra misión en el mundo”. En lugar de enviar ese mensaje, la especialista en medios de comunicación y perspectiva de género, dijo que es preciso documentar en dónde está fallando la política pública.
Lagunes Huerta puntualizó “el tiempo se detuvo para las mujeres embarazadas, porque pese a los avances científicos nosotras nos seguimos muriendo por las mismas razones que se morían nuestras bisabuelas”.
En el año 2009 murieron mil 207 mujeres por causas asociadas al embarazo, parto y pos parto, de las cuales 33.1 por ciento no tenía seguridad social y 31.1 por ciento tenía Seguro Popular (SP).
Para 2010 se reportaron 992 muertes maternas, de las cuales 39.1 por ciento contaba con SP.
En este escenario, Lucía Lagunes planteó que quienes están en los medios de comunicación deben transmitir que la mayoría de las defunciones son resultado de la falta de garantías para que las mexicanas ejerzan su derecho a la salud sexual y reproductiva.
La MM, dijo, es resultado de las “malas decisiones hospitalarias”, ya que con frecuencia el personal de salud carece de la capacidad de respuesta para responder con acciones inmediatas a una emergencia obstétrica y poder “salvar la vida de las mujeres”.
Las decisiones legislativas también afectan la atención de la problemática al “no priorizar los recursos necesarios para la infraestructura hospitalaria y la defensa y promoción de los derechos sexuales y los derechos reproductivos”.
Muestra de ello, es la reducción de recursos hecha por la Cámara de Diputados al programa Reducción de la mortalidad materna, ya mientras en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2011 le otorgó 298 millones de pesos (mdp), para 2012 lo redujo a 255 mdp, lo que significa 43 mdp menos.