Carolina QUEZADA  Oaxaca, México.- El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva, reconoció aquí, que en México a pesar de su legislación, la población indígena siguen siendo vulnerable a la violencia.   [caption id="attachment_126652" align="alignright" width="300" caption="Foto:www.50mm.mx"][/caption] Al inaugurar  junto con el gobernador, Gabino Cué Monteagudo el Foro Derechos de los Indígenas: Por una vida sin Violencia en la Familia”, el ombudsman nacional   expuso que las diversas formas de violencia que sufre este sector van desde la exclusión a la discriminación, pasando por abusos físicos y psicológicos, que muchas veces ocurren desde el seno familiar.  “La violencia familiar es ejercida principalmente hacia las mujeres y los niños. El ejercicio de ésta atenta contra su integridad y pone en riesgo su salud física y mental, además de generar costos sociales y económicos difícilmente resarcibles. De este modo, el hogar constituye un espacio de alto riesgo para su integridad”  Plascencia Villanueva  señaló que los usos y costumbres no justifican la violencia intrafamiliar, ni el abuso contra las mujeres y las y los niños indígenas en sus hogares.  “La violencia doméstica es una de las conductas más reprobables en las comunidades indígena”, expresó. [caption id="attachment_126653" align="alignleft" width="200" caption="Mujeres y niñez indígena los más afectados por la violencia familias: Foto:www.50mm.mx"][/caption]  Recordó que de acuerdo con información del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), las niñas y los niños indígenas representan en nuestro país la población con mayores carencias y el menor grado de cumplimiento de sus derechos humanos.  Expuso que a familia es el núcleo social más importante, es el primer vínculo y la antesala de cualquier otra institución y “no hay mejor escuela que la familia para fomentar en el individuo el conjunto de valores necesarios para su desarrollo en sociedad”.  En ese contexto, el ombudsman dijo que la efectiva defensa de los derechos de las personas que pertenecen a los pueblos y comunidades indígenas en el país , debe ser considerada como un asunto de primer orden en la agenda nacional.  Asimismo, agregó,  el mejoramiento a sus condiciones de vida, trabajo, salud y educación tiene que ser uno de los principales ejes rectores de las políticas públicas y las acciones gubernamentales en un Estado democrático. También  detalló que en México, 15.7 millones de personas se reconocen como indígenas, de las cuales sólo 6.6 millones hablan una de las diversas lenguas naturales. Esta población representa alrededor del 14% del total del país, además de una  distribución es desigual en el territorio nacional, pero no hay Entidad Federativa en la que no tenga presencia. Admitió que los problemas relacionados con población indígena son muchos desde la pobreza, analfabetismo, falta de condiciones adecuadas de salud, de vivienda y de oportunidades de desarrollo humano, así como la frecuente violencia.  Esta situación de vulnerabilidad en la que se encuentran motiva para tomar acciones encaminadas a la protección plena de sus derechos y cambiar esta realidad social.  El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, firmó con el gobernador Gabino Cué y la presidenta del DIF-Oaxaca, Mané Sánchez Cámara,  un convenio de colaboración para erradicar la violencia domestica en  comunidades indígenas oaxaqueñas.