Patricia BRISEÑO/Cimac
Oaxaca, México.- La Dirección General de Población de Oaxaca (Digepo) informó que la tasa de fecundidad entre las adolescentes del estado –de entre 15 y 19 años de edad– se sitúa en 62 nacimientos por cada mil, una de las más elevadas a escala nacional.
El titular de la Digepo, Wilfredo Vásquez López, explicó que la alta tasa de fecundidad se debe a obstáculos relacionados con la oferta y la demanda de métodos de planificación familiar.
A propósito de la conmemoración del Día Nacional para la Prevención del Embarazo No Planificado en Adolescentes, el funcionario detalló que la demanda insatisfecha de métodos anticonceptivos en el estado es de 31.4 por ciento, ubicando a la entidad en el lugar 32 en este indicador nacional, por debajo de Chiapas y Guerrero.
Según estimaciones del Consejo Nacional de Población (Conapo) con base en la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (Enadid) 2009, en Oaxaca se registraron cuatro mil 99 embarazos adolescentes, de los cuales tres de cada 10 no fueron planeados y poco más de uno de cada 10 no fue deseado.
El embarazo en las adolescentes es considerado como riesgoso por diversos factores, entre los de salud, destaca por ejemplo, la alta probabilidad de muerte durante las fases del embarazo, parto y puerperio; y entre los sociales se encuentran las vulnerabilidades que enfrentarán las madres adolescentes que están en situación de marginación y pobreza.
Con base en el Censo de Población y Vivienda 2010, Oaxaca cuenta hoy con 409 mil 308 adolescentes entre los 15 y 19 años (10.8 por ciento), de los cuales 50.7 por ciento son mujeres (207 mil 688) y 49.3 por ciento, hombres (201 mil 620).
Vásquez López reconoció que el embarazo no planificado en adolescentes presenta condiciones críticas: “Se estima que en Oaxaca la edad promedio de la primera relación sexual en las mujeres de 15 a 19 años es de 16 años, mientras que en el conjunto de las mujeres en edad reproductiva (15 a 49 años) el promedio es de 19 años”.
Según la Enadid 2009, seis de cada 10 oaxaqueñas iniciaron su vida sexual en la adolescencia, es decir, antes de los 19 años, mientras que cuatro de cada 10 comenzaron relaciones a los 20 años o más.
“Lo más importante de la primera relación sexual es que ocurra de manera protegida. Desafortunadamente el uso de la anticoncepción en la primera relación sexual no es una práctica extendida entre las y los adolescentes del país”, lamentó el titular de Digepo.
Abundó que en 2009, sólo tres de cada 10 mujeres entre 15 y 19 años utilizaron algún tipo de anticonceptivo en el primer encuentro sexual, mientras que esta proporción descendió a una de cada 10 entre las mujeres de 15 a 49 años de edad.
Vásquez expuso que la prevalencia de uso de anticonceptivos entre este grupo de edad es apenas de 36 por ciento, mientras que para las mujeres en edad reproductiva (15 a 49 años) alcanza el 63.4 por ciento, lo anterior sucede a pesar de que el 92.8 por ciento de las adolescentes manifestó conocer al menos un método de control natal.
Por lo anterior, la Digepo recomendó acciones para una educación integral de la sexualidad en el sistema educativo, ampliar los servicios de salud amigables, diseñar y aplicar sistemas de atención en salud específicos a este sector de la población, y garantizar recursos suficientes para el suministro básico de métodos modernos que incluyan la anticoncepción de emergencia en los sistemas de salud.
Además de reforzar las estrategias de información, educación y comunicación en población dirigidas a los jóvenes y adolescentes para garantizar el pleno ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de este grupo prioritario de la política de población.