Oaxaca, México.- El Congreso del Estado de Oaxaca aprobó este martes por unanimidad la propuesta con punto de acuerdo del diputado Flavio Sosa Villavicencio para crear una comisión interinstitucional formada por los tres Poderes del Estado con el fin de que diagnostique y solucione la conflictividad agraria en el estado.
La Cámara de Diputados pedirá también al Poder Ejecutivo federal que ordene a la Secretaría de la Reforma Agraria, Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas e instancias federales vinculadas, que intervengan y coadyuven de manera eficaz en la elaboración de un diagnóstico y un plan de acción que resuelvan de fondo los conflictos agrarios del estado de Oaxaca.
“La gobernabilidad en Oaxaca está en grave riesgo”, advirtió Flavio Sosa Villavicencio al exponer su iniciativa de punto de acuerdo; “los conflictos entre hermanos derivados de la propiedad de la tierra han dejado año tras año enfrentamientos violentos que mancillan con sangre la aspiración del pueblo de arribar a un estado democrático, justo y pacífico”.
Señaló que en Oaxaca existen oficialmente 134 conflictos agrarios, lo que representa más de la cuarta parte de los 518 conflictos agrarios y territoriales que atiende la Secretaría de la Reforma Agraria en todo el país.
“No son lejanas, ni pueden serlo todavía, las 16 muertes por el enfrentamiento entre Amoltepec y Zaniza, ni las de los 26 habitantes de Santiago Textitlán en la masacre de Agua Fría. Tan sólo el conflicto entre El Paraíso, Santiago Amoltepec y Santa Cruz Itundujia ha dejado, de 1944 a la fecha, una estela de más de 300 muertos, viudas y un número incuantificable de huérfanos”, expresó.
Señaló que además de la Sierra Sur, hay conflictos por límites en Sierra Norte, Mixes, Valles Centrales y el Istmo de Tehuantepec. “La conflictividad agraria en Oaxaca es un polvorín, que sólo espera una chispa para incendiar al estado. No olvidemos que los grandes acontecimientos en la historia de nuestro país están ligados a procesos relacionados con la posesión de la tierra”.
Señaló la necesidad de dimensionar con precisión el problema para tener claridad sobre la situación jurídica, social y política de las partes en conflicto. “Necesitamos saber qué conflictos están permeados por la lucha por el control de los recursos naturales, como el agua, los bosques, los minerales, y cuáles han quedado sin resolver a conveniencia de políticos, empresas, funcionarios o integrantes de las propias instancias agrarias”.
“Necesitamos saber cuándo la solución no ha llegado por la falta de una mínima compensación económica; necesitamos saber si la conciliación incluye procesos transparentes de participación comunitaria, y si las personas encargadas de ella han realizado adecuadamente su trabajo o se han vendido al mejor postor”, expresó en la tribuna.
Ya con un panorama claro, detalló, es necesario elaborar una propuesta de solución, aplicarla y vigilar su cumplimiento.
“En esa búsqueda, la presente iniciativa propone exhortar a los titulares de los poderes Ejecutivo y Judicial del Estado de Oaxaca, para que en coordinación con el Congreso instalen una comisión multidisciplinaria cuyo objetivo sea analizar y formular un diagnóstico sobre la conflictividad agraria en Oaxaca, elaborar una propuesta de solución y vigilar su posterior ejecución”, dijo.
Al solicitar a la asamblea aprobar el punto de acuerdo con carácter de urgente y obvia resolución, señaló que éstos “son conflictos que datan desde la época colonial y hace décadas que debieron ser resueltos”.
Finalizar este problema, dijo, es responsabilidad gubernamental; “han pasado gobierno tras gobierno y cada administración tiene una larga deuda de vidas humanas, por su inacción o por su insuficiente acción para solucionar estos conflictos. De no aprobarse el carácter urgente, ¿cuántos muertos más deberemos ver caer antes de iniciar la solución? ¿Cuánta sangre más debe correr?”
“Les invito, compañeras y compañeros, a que no seamos cómplices de una omisión criminal”, dijo a las y los diputados, que finalmente resolvieron a favor del carácter urgente y de la iniciativa