Otra propuesta que deseo manifestar en este escrito es la creación de publicaciones virtuales gubernamentales, ya que las ediciones que se conciben actualmente son costosas y no se distribuyen ni se promocionan fuera del estado (aunque realmente se publican muy pocos libros, esto, en el caso de temas literarios). La mayoría de esos libros se quedan guardados en las bodegas, sin nadie que pueda aprovechar ese conocimiento. Así que al final, tanto los autores, como sus libros se quedan en el olvido.
A partir de las publicaciones electrónicas, éstas, se pueden promover de manera gratuita y con un mayor alcance en la difusión de los autores locales. Además, se abaratan los costos y se pueden realizar más publicaciones. De igual manera, se les podría pagar a los autores y firmar un documento para la difusión gratuita de su material por un tiempo determinado. Los libros electrónicos tienen muchas ventajas a comparación del libro impreso, aunque no podemos dudar que el impreso es muy bello, pero ya han pasado más de quinientos años del invento de Gutenberg y aquí hay personas que nunca en su vida han visto un libro, lamentablemente. Además que todo sería con el objetivo de promover el gusto por la lectura. Junto a la propuesta de los libros virtuales, también lanzo la propuesta de equipar todas las bibliotecas públicas en el estado con dispositivos electrónicos. Bien sabemos que las bibliotecas en Oaxaca son muy pocas, mal cuidadas y con pocos libros; por tal motivo, debemos utilizar las posibilidades que da la tecnología, ya que haciendo un análisis sencillo, el lector llamado Kindle (sólo por nombrar alguno, en su última generación, además que tiene las características adecuadas para una buena lectura) tiene un costo aproximado de 3000 pesos en el mercado, además de tener una capacidad para almacenar alrededor de 2000 libros, y la batería alcanza para un mes en uso promedio, viendo las ventajas, con unos 5 dispositivos como estos, en cada una de las bibliotecas, llenándolos con la información necesaria, podrían acceder al mundo del conocimiento en cualquier parte del estado, cosa que con los libros impresos ha sido imposible. Todo esto se podría tomar como una idea absurda, pero ya en muchas partes del mundo están equipando las bibliotecas con el fin de promover la lectura y el estudio. Estas tres ideas podrían ir de la mano, ya que al hacer libros virtuales y equipar a las bibliotecas con lectores electrónicos; las brigadas de artistas, entre ellos escritores; podrían enseñar a las personas de las comunidades el buen uso de los lectores y el enorme placer que proporciona la lectura. --