Oaxaca, México.- Con el apoyo del programa de Coinversiones Culturales del Fondo Nacional de las Artes, la artista multimedia Amanda Gutiérrez desarrolló en tres etapas el proyecto Topografías del tiempo, el cual conjunta recursos como el video, imágenes fijas, entrevistas y ambientes que son como ensoñaciones entrometidas. Conaculta, a través del Laboratorio Arte Alameda, del INBA, presentó la conclusión de este trabajo desarrollado por su autora en las ciudades de Chicago, en Estados Unidos y en el municipio de Ecatepec, en el Estado de México, a las cuales se sumó en la etapa final, el pueblo de Calpulalpan, Oaxaca. Acompañaron a la artista visual Octavio Avendaño, quien participó como curador de la obra, y Laura Balboa, diseñadora gráfica que desarrolló la edición de las imágenes que se incluyeron en el DVD que contiene el resultado final del trabajo. Gutiérrez detalló que esta propuesta se planteó desde el principio como una instalación multimedia que debía ser presentada a manera de un tríptico y contenida en un formato digital, para de esa manera poder mostrar las ideas y lecturas que la autora desarrolló respecto la migración. Además, las imágenes y entrevistas reunidas en esta obra son un entrecruzamiento de distintas épocas y contextos, que comienzan en los años 40, en Estados Unidos, que en plena Guerra Mundial recibió a trabajadores mexicanos dentro del programa Braseros, el cual constituye la primera oleada de migrantes a ese país y que se llevo a cabo de forma legal. En las décadas siguientes, este fenómeno se convirtió en una acción ilegal pues el gobierno de Estados Unidos ya no requería la mano de obra, pues sus ciudadanos ya habían regresado, una vez que ya había finalizado el conflicto bélico. Gutiérrez establece a partir de las construcciones más antiguas de las mencionadas ciudades, una serie de relaciones e interpretaciones que documentan en conjunto la manera en que los migrantes se integraron, o no, al contexto en que se encontraban. Mientras que en el caso de los poblados mexicanos, su interés se centró en los edificios que dejaron sus habitantes. “De esta manera –dijo la artista- propongo en conjunto una lectura en tres canales –audio, video e imágenes-, de lo que ha ocurrido a lo largo de esas décadas y cómo se encuentran en el presente tanto los lugares como las personas, quienes dan testimonio oral de su experiencia de vida, al tiempo de generar diversas reflexiones acerca de la migración. “Uno de los principales retos que encontré al desarrollar este proyecto fue la necesidad de llevar el formato de la instalación al video, pues el producto final del trabajo es un tríptico, que ahora presentamos en el Laboratorio Arte Alameda, que contiene el DVD y las consideraciones de quienes hemos participado en él, mismo que estará disponible en museos y galerías de Conaculta en el país para futuras consultas”. Además, en abril próximo Topografías del tiempo se presentará en una exposición colectiva en el Centro Cultural Tlatelolco, en formato de instalación con tres canales de salida, que serán montados en su caso con el mismo formato del tríptico, para permitir que el espectador acceda a todos los niveles de lectura que propone Gutiérrez en su obra. En su oportunidad, Octavio Avendaño señaló que el trabajo de Gutiérrez toma como punto de partida la memoria, la cual desarrolla a manera de paisaje, y a este como instrumento de memoria. “Es también un juego de contrastes de orden temporal y del topos, es decir escenarios de las ciudades de Chicago, Ecatepec y el pueblo de Calpulapan en Oaxaca, en el que se lograr revelar las huellas de la memoria y humanizar el complejo paisaje de la migración. “Se trata de una perspectiva de orden histórico que subraya el desplazamiento de los braceros mexicanos que trabajaron de manera legal  en Estados Unidos, hacia la problemática de la migración ilegal contemporánea, logrando trascender la trivialidad y anular la polifonía de lo emotivo, y la conmiseración, para ubicarse en el orden de la experiencia estética, posibilitada por la operación del topos y la grafía, que conllevan a la introspección”.